No sólo impusieron el nombre del ex combatiente de Malvinas, Remigio Fernández al cuartel en un acto el sábado pasado, sino que los Bomberos Voluntarios de San Miguel también inauguraron mejoras edilicias en el edificio que aún falta terminar, y que continuará por la dedicación de quienes sirven a la comunidad desde allí y más entusiastas aún por el reconocido apoyo del joven solidario, el cibernauta Santiago Marateas, quien a través de las redes sociales recaudó una millonaria suma de dinero para donar camionetas a varios cuarteles correntinos.
La sede de hombres y mujeres altruistas ahora tiene tamaño nombre de un héroe de la Patria e instalaciones en mejores condiciones para que desempeñen en dignidad y eficacia su invaluable tarea en la sociedad, logros que son fruto de un combo virtuoso para el bien común: el servicio y la solidaridad. Por cierto, que se consiguió tras la peor catástrofe ígnea de la historia de la provincia, la que quemó un poco más del 10 por ciento de su territorio en los meses del verano de 2021 y 2022.
Tras la información que brindó ayer EL LIBERTADOR en la página 11, cabe señalar la repercusión de esos actos en la localidad, que este viernes tuvieron repercusión en un medio nacional, como lo es TN.
Rescata el informe que este pequeño cuartel de pueblo, con piso de tierra y paredes sin revocar, fue el primero en reclamar más recursos para comprar una camioneta y poder combatir el fuego que devoraba el Parque Nacional Iberá.
Ese pedido llegó a Santiago «Santi» Maratea, quien con el dinero que recaudó en una megacolecta por redes sociales, les pagó una camioneta. Y no sólo a esta unidad, sino, como se indicó, a muchas de otras localidades de Corrientes. La exposición también sirvió para mostrar la precariedad con la que subsistía el cuartel y a partir de ahí la historia cambió.
Tres meses después, en el fin de semana largo del Día de la Bandera, el equipo de bomberos de San Miguel pudo inaugurar el cuartel renovado: un techo de chapa brillante, una cochera al aire libre para la camioneta -que tiene en un costado la inscripción «Gracias Santi Maratea», tal como lo hicieron los demás- y una placa en homenaje al sanmigueleño caído en Malvinas.
PARA destacar
"Fue muy feo lo que pasamos en los incendios y muy lindo también porque vimos que hay gente de muy buen corazón, que nos ayudó mucho. Recibimos donaciones de alimento, material, de todo. Falta bastante todavía, pero se avanzó muchísimo. Fuimos haciendo todo a pulmón", cuenta Cristian, uno de los bomberos.
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