Circular 43347: una nueva reglamentación para obtener la ciudadanía italiana
El 3 de octubre de 2024, el Ministerio del Interior de Italia aprobó un nuevo reglamento a través de la circular 43347. Esta medida introduce cambios en la tramitación de la ciudadanía por descendencia, también conocida como iure sanguinis. La Circolare 43347 se basa en un reciente fallo de la Corte de Casación Italiana mediante una interpretación más restrictiva de la transmisión de la ciudadanía.
Según este nuevo reglamento, si un antepasado italiano se naturalizó en otro país y convive con su hijo con 21 años o menos, ambos pierden su condición de ciudadanos italianos. Este cambio afecta directamente a los descendientes de quienes migraron a países como Argentina, Brasil y Uruguay, donde se concentran grandes comunidades con ascendencias italianas. De esta manera, la línea de transmisión de la ciudadanía se interrumpe en los casos en los que el antepasado renunció a la nacionalidad italiana.
Desde el Ministerio de Relaciones Exteriores, bajo la dirección de Antonio Tajani, se sostiene que la nacionalidad de este tipo ha sido demasiado laxa hasta ahora. Según las autoridades italianas, muchos solicitantes buscan obtener la ciudadanía no para residir en Italia, sino para acceder a otros estados de la Unión Europea.
Esta postura ha llevado a la introducción de la Circolare 43347, la cual busca frenar esta tendencia y asegurar que quienes obtengan la nacionalidad italiana tengan un vínculo genuino con el país.
Cómo tramitar la ciudadanía italiana
La ciudadanía italiana se puede obtener principalmente por dos vías: por descendencia (iure sanguinis) o por matrimonio. Cada una de estas vías tiene requisitos y procedimientos específicos que deben cumplirse rigurosamente. Para quienes buscan obtener la ciudadanía por descendencia, es fundamental demostrar un vínculo sanguíneo directo con un antepasado italiano.
La línea de transmisión varía dependiendo de si se sigue la línea paterna o materna. No existen límites de generaciones por línea paterna; es decir, cualquier descendiente puede solicitar la ciudadanía siempre y cuando pueda demostrar la relación con el antecesor italiano. Por otro lado, solo se puede transmitir la ciudadanía por línea materna a los hijos nacidos después del 1 de enero de 1948, fecha en que entró en vigor la Constitución Italiana que otorgó este derecho.
Obtener ciudadanía por matrimonio exige que el solicitante esté casado con un ciudadano italiano inscrito en el Registro de los Italianos Residentes en el Exterior (AIRE), y ambos deben compartir el mismo domicilio legal. Además, se requiere que hayan transcurrido al menos tres años desde la ceremonia de matrimonio y que el solicitante posea un conocimiento básico de la lengua italiana, requisito lingüístico que busca garantizar una base para manejar el idioma oficial del país.
Una vez determinado el tipo de trámite, el siguiente paso es solicitar un turno para la revisión de documentos a través del sistema Prenot@mi. El solicitante debe registrarse en el sistema proporcionando datos personales como nombre y apellido, lugar y fecha de nacimiento, correo electrónico, dirección, ciudad, país, número de teléfono y el consulado al que desea asistir. Una vez completado el registro, se recibe un correo de confirmación con un código único para validar la cuenta.