Carolina Díaz y Constanza Gómez, son madre e hija y llevan adelante un emprendimiento con un fuerte propósito social. Ayudar a otras mujeres para que puedan desarrollar habilidades y competencias que les permitirán abrirse camino en el mercado laboral. El éxito que están teniendo, las impulsó a lanzar una aplicación con alcance internacional.
«Nuestro objetivo es brindar herramientas, porque estamos convencidas de que la comunicación es muy útil para la transformación, en todos los sentidos: vida personal, familiar, laboral, profesional, de relaciones y su participación social», explicó Carolina a EL LIBERTADOR.
Es por eso que lanzaron una academia de educación en comunicación y oratoria, que está destinada a mujeres en edad de trabajar. Si bien, lo hicieron durante 2020, en plena pandemia, sus actividades ya habían comenzado mucho antes.
DAR EL SALTO
Durante su infancia, Carolina vivió una situación que la marcó durante mucho tiempo. En una exposición oral en la escuela, una maestra le hizo una pregunta a la que ella no supo cómo responder. «Pero no fue el hecho no saber, sino el trato que recibí por parte de la docente», enfatizó.
Eso la bloqueó y generó inseguridad, pero gracias a la determinación y al estudio lo fue revirtiendo, al 100 por ciento, destaca ella. «Yo necesitaba ver cómo resolverlo, porque tenía una personalidad muy curiosa, me gustaba investigar. Pero al momento de transmitir eso, me quedaba con la sensación de que no podía hacerlo», contó.
Por esa razón, estudió Periodismo y la Licenciatura en Comunicación Social, para adquirir herramientas, aunque señaló que no fueron suficientes, «la habilidad de hablar en público la adquirí de manera autodidacta, formándome en oratoria y comunicación interpersonal», sostuvo.
Cuando sintió que logró su objetivo, decidió terminar su etapa en los medios y abocarse exclusivamente al asesoramiento de equipos de trabajo, pertenecientes a empresas y a diferentes personas.
PERSPECTIVA
DE GÉNERO
Un cambio muy grande que llevó adelante Carolina, fue el de empezar a ver cómo la mujer se desenvolvía en los distintos ámbitos laborales. Su análisis le permitió detectar la brecha salarial, la falta de oportunidades y disparidad en el acceso a cargos de poder.
Decidió hacer algo al respecto, a esa nueva etapa decidió sumarse Constanza. Que hasta ese momento seguía estudiando la Licenciatura en Publicidad.
Su primer proyecto juntas fue «Encantadas», el primer gabinete dirigido a niñas y adolescentes, que surgió en el año 2009. Que consistía en talleres que se realizaban una vez a la semana, en el que aprendían a través de herramientas lúdicas, como juegos o realizaban un proyecto televisivo, por ejemplo. «Porque buscábamos que se vean como potenciales mujeres participativas sociales de distintos ámbitos», mencionó Carolina.
El año de lanzamiento, fue un momento en el que las redes sociales aún no dominaban la comunicación. Y la perspectiva de género no tenía la trascendencia necesaria. Convirtiéndose así en pioneras.
A pesar de la innovación que estaban ofreciendo, les resultó difícil poder sostener su emprendimiento. «No era rentable porque para los padres no era una prioridad, y era como una actividad extracurricular que competía con otras disciplinas como inglés, danza y gimnasia», explicó Constanza. Y como la principal demanda venía de los padres, «que nos pedían el servicio de entrenamiento, tuvimos que transformar nuestro trabajo y orientarlo a los adultos, así surgió en el año 2011 Comunicación Calificada», agregó.
Claudia Dominguez, es una de las tantas clientas que tuvieron Carolina y Constanza a lo largo de estos años. Inició durante 2012 y 2013. También habló con este medio y contó por qué decidió tomar clases de oratoria. «Tomé el curso porque había renunciado en una empresa multinacional. Y pensaba que esto sumaría a mi currículum para un futuro puesto laboral. Pero jamás me imaginé que me iba a abrir todo un mundo nuevo. Donde fui capaz de descubrir junto a ellas el poder de las palabras, a ganar confianza y perder miedos», subrayó.
Además, agregó que gracias a lo que aprendió tuvo la confianza para animarse a emprender. Resaltando que se convirtió en su propia jefa, y se dedica a la restauración de muebles y distintos objetos. Brinda clases, y asesoramiento de decoración de interior.
PROPÓSITO SOCIAL
En el año 2020 decidieron renovar su marca y apostaron por «Calificadas». En el que inicialmente estaba destinado a hombres y mujeres. A través de entrenamientos personalizados grupales de manera online.
Sin embargo, siempre sintieron que tenían que poner el foco en su objetivo inicial, empoderar a las trabajadoras o las que se están preparando para serlo.
A lo largo de dos años, experimentaron un gran crecimiento que las impulsó a pensar un producto digital, que les permitiera cubrir una mayor demanda, y llegar a otros países de habla hispana.
«A través de nuestras redes, principalmente TikTok nos dimos cuenta que el 80 por ciento de nuestros seguidores eran mujeres. Y en segundo lugar, eran principalmente de otros países de Latinoamérica. Eso nos mostró el interés y la necesidad de conectar con esos públicos», subrayó Constanza.
Y a fines de 2021 empezaron a planificar su nuevo producto y sumaron a otras personas y proveedores correntinos, con los que armaron un equipo interdisciplinar que estuviera dirigido exclusivamente para mujeres. El lanzamiento oficial fue a finales de diciembre del año pasado.
Además, durante todo enero será gratuita. «Y a partir de febrero, la idea es que sea a través de una suscripción», resaltaron ambas emprendedoras.
Quienes deseen probarla, podrán descargarla en su dispositivo móvil a través de la siguiente dirección: calificadas.app/download
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