Durante todo 2022 ambientalistas y proteccionistas «tratamos no sólo de transmitir un mensaje, sino también estuvimos y ayudamos a los más afectados por los incendios históricos que dañaron a más del 10 por ciento del territorio provincial, efecto de una prolongada sequía», recordó uno de ellos, Luis Martínez, quien como otros jóvenes se ocupan y preocupan por el planeta que recibirán producto de los intensos fenómenos naturales.
«Es inevitable la consecuencia del cambio climático y aún hay quienes lo niegan y creo que es importante hablarlo. Hacer hincapié en un trabajo sostenible y tener una mirada productiva, de desarrollo, de producción que sea amigable con el ambiente, siempre mirando desde el punto de la conservación, y tratar de resguardar nuestros recursos naturales», recomendó luego de apuntar que con los efectos que cada vez son más fuertes por el cambio climático «es importante tener una mirada solidaria».
Cuando se produjeron los incendios de manera consecutiva «me tocó recorrer las zonas más afectadas, visitar los parajes, hacer rescate de animales silvestres, ver la situación que atravesaba la provincia, para poder no sólo transmitir lo que estaba ocurriendo, sino también poder trabajar en lo que estaba pasando en la zona», dijo el promotor de una conciencia ecológica en la población.
Y esa inevitable consecuencia del cambio que advierte el ambientalista como tantos otros en Corrientes, se expone agresiva a los ojos de la humanidad, al comparar imágenes tanto satelitales que en estos últimos días se reprodujeron por diversos medios como en la comparación de simples fotos que se registran de la playa de la ciudad de Esquina, de los diferentes estados del río Corriente. O basta mencionar la movida que debieron encarar las autoridades de la cercana localidad de San Isidro que no pudieron habilitar el balneario en el paso Santa Rosa, ni utilizando canalizaciones, hasta que debieron recurrir a otro lugar para contar con un espacio que posea más agua, al cual lo inauguraron este sábado, tras frenéticos trabajos.
En cuanto al río Corriente cercano a su desembocadura, se informó que los propietarios de embarcaciones deben amarrarlas ya sobre el Paraná, porque el nivel frente a la costa esquinense les imposibilita la navegabilidad. «No está permitida la navegación», comentaron a EL LIBERTADOR para subrayar casi a la vez, «es que no pueden navegar directamente, porque no hay agua», por lo cual las lanchas las dejan al borde del Paraná.
Más al Sur de la Mesopotamia, la Agencia Espacial Europea dio a conocer una desoladora toma satelital de la sequía en la Argentina.
Fue publicada en Twitter, donde en 2021 ya habían alertado por la cruda bajante del río Paraná y la sequía en sus márgenes. Ahora, el panorama se amplió peligrosamente. La publicación fue acompañada de dos tomas satelitales, una obtenida el 6 de enero de 2022 y otra recientemente, hace sólo días, producto del monitoreo del programa Copernicus, gracias al satélite Sentinel 3.
.