La antigua Casa Martínez, hoy sede del Museo Arqueológico y Antropológico, constituye un testimonio de la arquitectura colonial en la ciudad.
Es patrimonio y Monumento Histórico Nacional, de la ciudad de Corrientes, declarado en 1949.
LA CASA
El museo, fue creado a fines del año 2015, luego de la restauración de la antigua Casa Martínez que lo alberga, construida en el año 1782.
La casa presenta, en su edificación, las características que prácticamente cubren todos los períodos desde la fundación de la ciudad a las distintas etapas conflictivas.
Parte de la casa está construida de forma colonial, con muros, piedras y material de recolección como la tierra y cubierta con madera.
El lugar tuvo adiciones de nuevas ampliaciones y confecciones tanto del siglo XIX como del XX.
Dentro de ella, se tiene una importante colección de objetos de la cultura guaraní y materiales antiguos de la casa.
Cuenta la historia que la casona recibió visitas de personalidades ilustres de la Argentina, por ejemplo, del general Manuel Belgrano, quien fue un asiduo visitante de la casa cuando se encontraba en la ciudad, como también del doctor Amado Bompland, entre otros.
MUSEO DE SITIO
Es una sala donde se exhiben todos aquellos fragmentos que, perteneciendo a la casa, se habían hallado de ruido y a partir de trabajos de limpieza arqueológica.
Se halló así fragmentos de distintos períodos, algunos del siglo XIX como ladrillones de un tamaño que todavía no eran estandarizados.
SALA DEL SIGLO XVIII
De las más antiguas que posee Casa Martínez.
Con galería en sus laterales y las paredes tienen aproximadamente 80 centímetros de espesor.
Estas viviendas tenían esta característica de adaptación al clima porque las galerías no sólo protegían las paredes de las lluvias, sino que genera una corriente de aire muy apropiada para un clima cálido y húmedo como el nuestro.
ANTIGUO
DORMITORIO
Hoy se exhiben restos de la cultura guaranítica, como las cerámicas, pintadas con cal o que tienen distintos tipos de grafías.
También, objetos utilitarios, para contener granos, alimentos o líquidos.
SALA
PRINCIPAL
En el acceso al museo, donde se halla la primera colección que recibe al público.
Fue una donación por parte del señor Aurelio Espinini, investigador de la botánica de nuestra región, estudioso en cuanto a orquídeas y que recopiló más de 30 mil ejemplares, sobre todo desde Paraguay a Corrientes.
Desde Asunción vino a radicarse a Corrientes y, toda su vida, se dedicó a investigar nuestra cultura.
Se puede observar entre la colección algunos amuletos, collares de cabeza de víbora y en otras vitrinas se ven collares con dientes de mono.
Hay objetos en piedra, líticos, platos de la región del Paraguay, todo ello son distintas recopilaciones que Espinini ha dejado en el museo.
También, la donación de una colección de objetos prehispánicos sobre todo de piezas eróticas del Norte, Noroeste y zona precolombina.
COLECCIONES
ARQUEOLÓGICAS
El lugar cuenta con un equipo que se encarga del ordenamiento y registro de las colecciones arqueológicas que han ido recibiendo e incrementando desde su inauguración.
Estas actividades que se desarrollan corresponden a un proyecto de extensión que han ido renovando y, tiene como objetivo, establecer una colaboración entre la Facultad de Humanidades, el Instituto de Cultura y el museo.
Producto de sus primeros trabajos de ordenamiento, el lugar recibió objetos que estaban almacenados en los depósitos de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), que era necesario comenzar a ordenarlos y registrarlos con el resto de las colecciones.
Uno de los aspectos interesantes que poseen los objetos son los distintos tipos de decoración de cerámica que hay a lo largo de las vitrinas del museo.
En una de las vasijas, se tiene el conocimiento que perteneció a la Estancia San Miguel y en su interior fueron hallados restos humanos. Este objeto fue utilizado como una urna funeraria.
.