En un discurso que duró una hora, Cristina Kirchner habló ante una Plaza de Mayo colmada de militantes y dirigentes que estaban expectantes de que la Vicepresidenta brindara alguna definición electoral en medio de la incertidumbre que invade al Frente de Todos. Sin embargo, la ex mandataria habló mayoritariamente del pasado, recordó en varios pasajes sus presidencias y la de Néstor Kirchner, utilizó frases ya en desuso y confrontó con Mauricio Macri, a quien mencionó con nombre y apellido luego de un largo tiempo.
Casi en el único pasaje en el que hizo referencia al gobierno de Alberto Fernández, la ex jefa de Estado mencionó los cortocircuitos con el Presidente, pero solamente para terminar criticando al líder del PRO: “Todos saben las diferencias que he tenido y tengo y no es necesario explicarlas… Lo dije un 20 de diciembre en La Plata cuando señalé: ‘Va a haber crecimiento, pero ojo cuiden los precios de la economía porque sino se lo van a llevar 4 vivos’. Y pasó, se lo están llevando 4 vivos. Porque Argentina volvió a crecer, porque a pesar de las equivocaciones o diferencias, este gobierno es infinitamente mejor de lo que hubiera sido otro de Mauricio Macri, no tengo dudas”.
Llamativamente -o no- Cristina Kirchner eligió a Macri como contrincante y evitó hacer una evaluación del cuarto gobierno kirchnerista. Tampoco habló de la inflación ni de los elevados niveles de pobreza, pero sí, como es habitual en sus últimas presentaciones, apuntó contra la Corte Suprema y pidió no pagar el acuerdo con el FMI.
Su discurso estuvo plagado de referencias antiguas y en desuso. De hecho, tuvo que explicarle a los “jóvenes de 20 años”, como expresó, lo que fue la revista Billiken. Ni bien llegó al escenario, la Vicepresidenta se refirió al clima y le preguntó a los militantes si había frenado la lluvia, mientras el público le gritaba que por su presencia había mejorado el tiempo. “Dios”, respondió Fernández de Kirchner sosteniendo su rosario y agregó: “Y yo quería ser una figurita de Billiken”.
También utilizó un viejo refrán para cuestionar al gobierno de Cambiemos por la toma de deuda: “Hace pocos días conocimos un informe de un organismo constitucional respecto del préstamo del FMI y se hacen todos los otarios, como perro que volteó la olla, y después de la pasan hablando de democracia”.
En paralelo, cuando denunció que el FMI le prestó los 57 millones de dólares a a Macri para financiar su reelección el público comenzó con el habitual silbido e insultos hacia el exmandatario. Automáticamente frenó a los militantes: “Como decía mi abuela, no tiene la culpa el chancho sino quien le da de comer, no nos equivoquemos”.
Todo el discurso de Fernández de Kirchner estuvo acompañado por los clásicos cánticos de los militantes kirchneristas, sobre todo al recordar los ‘70 y la necesidad de la avanzar en una “renovación del pacto democrático”, un reclamo que instaló desde el intento de asesinato que sufrió en la puerta de su casa en Recoleta. “Escucho y dicen que hay que acabar con el peronismo. Por favor. Si con ganarle alcanza por qué llegar al exterminio”, insistió, lo que provocó la respuesta de los presentes a coro: ”A pesar de las bombas, de los fusilamientos, los compañeros muertos, los desaparecidos, no nos han vencido”.
“Patria sí, colonia no”, retomaron en Plaza de Mayo cuando la expresidenta criticó, pero sin nombrarlo, a Gerardo Morales por su gestión en Jujuy y las políticas que lleva adelante con el litio. En ese sentido, pidió tener una “mirada estratégica” para que las empresas que llegan para exportar ese recurso “por lo menos que armen las baterías acá” y agregó: “Cuando escucho a algunos dirigentes, que respeto porque fueron elegidos por el voto popular, ponerse contentos porque en Bolivia han sacado legislaciones que cuidan el litio. Pero qué vocación de colonia, de querer volver a ser Potosí, ponete en la cabeza ser Malasia”.
A continuación, algunas de las principales frases del discurso de Cristina Kirchner:
“Hace exactamente 20 años que llegábamos con Él a esta misma plaza, en la que 30 años antes habíamos estado. Ese país que recibió aquel presidente patagónico de apenas 22% de los votos. No lo duden que sigue viviendo en el corazon del pueblo, como sigue viviendo cada argentino que le dio dignidad a este pueblo. Ese país que recibió venía de una gran crisis”.
“En estos tiempos en los que se habla tanto del Estado, que hace falta uno pequeñito, que no moleste, quiero contarles que cuando Él llegó el Estado era así de chiquitito. Quiero compartirlo con ustedes porque es necesario ante tanta confusión, armada premeditadamente, que llevemos a todos los rincones de la patria, en cada barrio, escuela, a la calle, que cuando él llegó el Estado era así de chiquitito, pero la deuda externa que le habían dejado era así de grande”.
“Cuando decidimos en 2008 la recuperación de Aerolines Argentinas el Estado le pagaba a la empresa española los salarios y el combustible. Pese a la fama de buenos administradores de los privados, ahí no fue así. Tampoco con las AFJP. No se jubilaba nadie pero cobraban bancos y administradores 12 mil millones de dólares durante los años en los que jubilarse no era un derecho”.
“A la patria hay que tomarla sin beneficio de inventario, hay que comprenderla y amarla completa. Estamos en esta plaza, que poblada de represión a madres y abuelas, el día que se caía la convertibilidad y se apropiaban de los depósitos a plazo fijo en el famoso corralito de aquel señor calvo y de ojitos claros. Cuando hoy vemos y escuchamos a quienes eran discípulos y colaboradores de ese ministro explicarnos lo que van a hacer, porque nosotros no entendemos de economía como ellos, quiero decirles que fuimos kukas los que pagamos los depósitos a plazo fijo con el Boden 12. Que no es una oferta para ir al shopping, es el bono que se le entregó a cada uno de los que cuando fueron a buscar los dólares y los pesos a los bancos no estaban. Esos dólares que se quedaron los genios de las finanzas los pagaron los kukas, Néstor y Cristina”.
“Cuando el compañero llegó a presidente de la República, el PBI era de 164 mil millones de dólares, cuando su compañera entregó el gobierno el 10 de diciembre de 2015, era de 647 mil millones de dólares. Pagamos durante 12 años y medio 100 mil millones de dólares de deuda que no habíamos contraído nosotros. ¿Fue magia? no, el modelo de construcción de la sociedad, de valor agregado, de inclusión social, de buenos salarios, no es pecado pagar buenos salarios, al contrario, es de buenos cristianos”.
“Son números inobjetables. Muchos dicen que mi segundo gobierno no fue bueno. No tengo duda de que es porque fue cuando más plata ahorraron los trabajadores”.
“No es que fueron 12 años fáciles. Es el otro argumento, tenían todo a favor. A los 3 meses de asumir como presidenta, por otro genio de la economía (por Martín Lousteau) casi me pongo el país de sombrero. Fue algo muy fuerte, en esta misma plaza, en aquella crisis que sinceramente dividió a la sociedad, una crisis política de magnitud”.
“Después en 2008 una sequía. Es algo redundante siempre en la economía Argentina. Entre 2008 y 2010 perdimos millones de cabezas de ganado. Un dirigente social se acordaba que en nuestra sequía colgaban a las vacas y decían esto es culpa de Cristina”.
“Cuando uno ve las principales economías que han surgido en los últimos 30 años, en Asia, no sólo China, lejos están de la doctrina que nos quieren imponer acá. Son modelos de acumulación acordados entre el sector público y privado en los sectores que más riqueza crean. Esa es la discusión que están esperando los argentinos y no las boludeces que se dicen en los medios de comunicación”.
“Créanme que para una militante política de mi generación haber, después de tres periodos de gobierno, podido decirles a los argentinos que le dejábamos un país mucho mejor que el que habíamos recibido era una muestra de orgullo. Más allá de las dificultades, porque tampoco era Disney”.
“Las familias, las empresas, tampoco estaban endeudadas. Porque el salario era el más alto de América Latina. Habíamos lanzado satélites al aire. Habíamos peleado contra los fondos buitres, y sin acceso al mercado de capitales pagamos más de 100 mil millones de dólares. Increíble. El famoso riesgo país con el que nos volvían locos, cuando nos fuimos era de 600 puntos. Esa Argentina dejamos”.
“¿Qué fue lo que recibimos cuando volvimos en 2019? Nuevamente endeudada la Argentina en dólares. Fuimos en 2016 y 2017 el país que más deuda en dólares tomó en el mundo. Cuando no se pudo pagar pasó lo que pasó. Otra vez el FMI. Con un adicional. Ya no eran los préstamos Stand By mas o menos normales que se daban a todos los países de la región. Le dieron (a Macri) para que pudiera ganar las elecciones 57 mil millones de dólares. Inédito, insólito”.
“No tiene la culpa el chancho si no el que le da de comer, decía mi abuela. Le liquidaron 45 millones de dólares y ni así pudieron ganar las elecciones, entregaron un país endeudado con dos dígitos de desocupación”.
“Todos saben las diferencias que he tenido y que tengo, lo dije en La Plata, va a haber crecimiento, terminaba la pandemia, pero ojo cuiden los precios de la economía porque si no el crecimiento se lo van a llevar cuatro vivos. Y pasó. Se lo están llevando cuatro vivos. Porque aún, a pesar de los errores, este gobierno es infinitamente mejor de lo que hubiera sido otro de Mauricio Macri”
“Créanme que para hacerlo (distribuir el ingreso) muchas veces hay que ponerle carita fea a los que tienen más. ¿O porqué se creen que en mi segundo gobierno pudimos llegar al 51% (de distribución)? Por qué creen que me odian, me persiguen y me proscriben. Así me quieran matar, soy del pueblo, nunca de ellos, del pueblo y de ahí no me muevo”.
“Si no logramos que ese programa que el FMI impone a sus deudores sea dejado de lado y nos permita elaborar un programa propio de crecimiento, industrialización e innovación tecnológica, va a ser imposible pagarlo. Cuando Néstor decía los muertos no pagan decía eso. ¿Se creen que lo van a poder pagar con commodities? A los commodities los regulan los flujos financieros y siempre los acomodan para que sigas debiendo. Fue un préstamo político y política tiene que ser la solución”.
“Tenemos que abrir la cabeza y mirar lo que les decía hace un rato, cómo en otras economías desarrolladas se articula lo público y lo privado. Tenemos recursos extraordinarios gracias a los kukas, también tenemos Vaca Muerta. Recuperación kuka. Litio. Materiales raros. Que vengan a explotarlos y no digo que los autos los hagan acá, pero por lo menos una parte de la batería hacela acá hermano, si te la estas llevando toda”
“Cuando escucho algunos dirigentes a los que respeto, ponerse contentos porque en Bolivia y en Chile impulsaron regulaciones que van a hacer que los capitales se vengan para acá. ¡Qué vocación de ser Potosí!. ¡Ponete en la cabeza ser Corea, no Potosí!”.
“Tenemos que repensar el sistema institucional argentino. No podemos seguir con la rémora monárquica de personas que son designadas de por vida y que nunca más rinden cuentas a nadie, ni a nada, no se saben sus declaraciones juradas, no se sabe dónde viven, que tienen, eso no es de república ni de democracia”.
FUENTE: INFOBAE