Corrientes tiene una reconocida riqueza histórica y cultural. El desempeño de la provincia es parte vital de la construcción de la nacional y no son pocos los hechos que rayan con la leyenda y están envueltos por un halo de misterio. Uno de ellos ocurrió el 6 de mayo de 1843, cuando la aparición de una misteriosa mujer fue la clave de una victoria que encaminó el curso de la historia local. A este suceso se lo conoce como el milagro de Laguna Brava y el nombre de la enigmática heroína sigue siendo una incógnita sin resolver.
Según los registros, en esa fecha un ejército de 2.000 entrerrianos llegó para tomar la Capital correntina. Habían sido enviados por el general Justo José de Urquiza, quien entonces respondía a Juan Manuel de Rosas. En la ciudad de Corrientes, Joaquín Madariaga y su tropa habían llegado poco antes para incorporar hombres y armas con los que poder hacerles frente. Eran 200 hombres. Diez veces menos que el enemigo.
Mientras los soldados rosistas, al mando de los coroneles Galán y Ramírez, acamparon en la zona de Laguna Brava, Madariaga le daba las últimas instrucciones a los correntinos en un sitio conocido Quinta de los Navarro, en el Departamento Lomas. Por las proporciones entre ambos bandos, el resultado no se anticipaba bueno para la tropa local, pero fue entonces cuando ocurrió lo inexplicable.
Los colegas del portal Descubrir Corrientes rescatan el episodio de esta manera: «Una avanzada lleva ante la presencia del jefe correntino a una mujer que pedía hablar con él». También citan dos versiones. La primera corresponde al historiador Hernán Félix Gómez quien registró que la extraña dama era «una joven mujer con un chal celeste». La segunda, es la de Manuel Vicente Figuerero quien transcribió el relato de un testigo del hecho, según el cual «era una mujer entrada en años y de aspecto distinguido, que vestía de blanco y cabalgaba en un flaquísimo rocinante».
EL MENSAJE A MADARIAGA
Cuando esta mujer estuvo ante Madariaga le dijo algo que iba torcer todas las probabilidades. «He venido expresamente a buscarlo para transmitirle la noticia exacta del enemigo. Hará una hora que acampó cerca de Laguna Brava, completamente descuidado, sin guardias avanzadas distantes. Los Cuerpos han desensillado sus caballos y se preparan para carnear. Si usted se apresura y los ataca por el lado de los montes que dan a la derecha, los derrotará fácilmente», declaró.
La sorpresa por la situación hizo que el general dudara en un principio de la certeza de la información, pero esta misteriosa dama pasó el interrogatorio que le hicieron los oficiales. Las respuestas de la extraña mensajera despejaron las dudas y esto fue lo que motivó a Madariaga a adelantar el ataque.
El relato también dice que antes de partir a la batalla, el correntino le dijo a la mujer: «Ve a la Capital y búscame cuando regrese a ella vencedor para recompensarte, en nombre de la Patria, por el servicio que le prestas».
Lo demás es historia conocida. Contra todos los pronósticos, el ejército de correntinos venció a los entrerrianos rosistas y poco después llegaron victoriosos a la ciudad de Corrientes. Sin embargo y pese a que pidió por su misteriosa colaboradora, el general Madariaga no la volvió a ver.
EL MISTERIO DE LA HEROÍNA CORRENTINA
Hay muchas teorías que intentan darle una explicación a lo ocurrido. La más difundida cuenta que tras la victoria, Madariaga participó de una ceremonia de agradecimiento en el templo de Nuestra Señora de la Merced. Estando allí se dirigió al altar para entregar su sable y habría visto que la puerta de la cripta estaba abierta y que los ruedos de la falda de la Virgen, al parecer, estaban salpicados de rocío, pasto seco y arena. Este hecho, del que no hay una certeza, hizo crecer la devoción de los creyentes.
La otra versión es más terrenal. Es el testimonio de un vecino de General Paz que, 90 años después de ocurrida la batalla, escribió una carta al padre Esteban Bajac en el que revelaba que la misteriosa dama sería Tomasa Soto, una residente de esa localidad. El hombre reclamaba que nadie más supo del acto heroico de esta dama a quien no se le rindieron los honores que merecía. Y pese a su insistencia, su testimonio nunca pudo ser comprobado, de la misma forma que el relato del templo de la Merced.
Los historiadores por su parte, sólo coinciden que el hecho ocurrió, aunque muchos se nieguen a llamarlo milagro. Y aún con la reticencia que les exige la precisión histórica, ninguno pudo resolver el misterio de la enigmática heroína correntina.
LAGUNA BRAVA, UN LUGAR PROTEGIDO
La Laguna Brava es uno de los más notorios espejos de agua que se ubican al Este de la ciudad de Corrientes, en el barrio homónimo de la Capital correntina. Está constituida por aproximadamente 231 hectáreas e hidrológicamente forma parte de la llamada «Cañada de Mandiyuraití» subsidiaria de las cuencas del Santa Lucía y Riachuelo.
En 2012, fue la Reserva Natural por Ley Nº 6.115/12, como iniciativa de un grupo de alumnos y docentes de la escuela José Hernández, con el propósito de llevar adelante medidas de protección ambiental del recurso hídrico. Estos estudiantes buscaban darle un valor al gran espejo de agua que fue testigo de la batalla que expulsó al ejército rosista en 1843.
Los objetivos de la creación de la Reserva eran proteger a la fauna silvestre que allí habita; eliminar el impacto ambiental generado por el vertido de efluentes y gases de la industria; empoderar a la comunidad mediante diversas actividades en el sentido del cuidado del medio ambiente; prever otro tipo de actividades positivas para el aprovechamiento sustentable de la Laguna Brava, en términos de conservación, turismo, actividades culturales, etcétera.
«En estos años hemos avanzado en un área de conservación donde ya tenemos un muelle instalado y una casilla de guardaparques que nos va a permitir que los correntinos y visitantes puedan disfrutar de ese ecosistema tan hermoso como lo es la Laguna Brava similar al ecosistema del Iberá, a tan sólo diez minutos del centro de la ciudad», dijo, a mediados del año pasado, el viceintendente de la Capital, Emilio Lanari.
En esa oportunidad daban cuenta de todas las acciones que se llevan adelante por parte del Municipio, para continuar con la preservación de un espacio con un alto valor histórico, cultural y ambiental.
Foto: Luis Gurdiel | Ilustración: gentileza