Ayer en la mañana, los policías de la Unidad Especial Antiarrebatos y del Destacamento San Marcos, allanaron un domicilio del barrio San Martín de la Capital. Descubrieron que se trataba de un presunto kiosco y dentro había hasta un mini invernadero de marihuana. Detuvieron a un hombre de 54 años.
Las fuentes oficiales precisaron que el operativo fue pedido por la Unidad Fiscal Nº 6 a cargo de una importante investigación, y la orden de allanamiento fue otorgada por la jueza de Garantías María Josefina González Cabañas. Con el permiso oficial, los uniformados llegaron aproximadamente a las 9.30 a la casa ubicada por calle Madariaga al 1.100 del mencionado barrio.
Ingresaron con dos testigos y sin hacer mucho esfuerzo observaron que en una mesa había dos armas de fuego, cargadas con cinco proyectiles intactos. Al lado, un revólver con varios proyectiles y vainas servidas. Tras revisar el lugar dieron también con una suma de dinero en efectivo, de la que los moradores de la vivienda no supieron explicar el origen.
Acto seguido, en una habitación notaron una estructura metálica con varias lámparas que funcionaba como invernadero y varias plantas que luego el personal de Drogas Peligrosas y Crimen Organizado constató que eran de marihuana.
Por su parte, Negro, el perro de la fuerza los ayudó a encontrar cinco piedras y una bolsa de polietileno y frascos de vidrio. Se trató de 696 gramos de marihuana y 216 de cocaína. Los demás elementos hallados en el lugar son: tres balanzas, tijeras y retazos de polietileno.
Un hombre de 54 años identificado con el apellido Molina quedó detenido a disposición del magistrado Federal en turno. «Está incomunicado ya que se encuentra involucrado en la causa por supuesta infracción a la Ley Nº 23.737 y por tenencia ilegal de arma de guerra», completaron la información.
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