Mientras se espera que el cuerpo legislativo reúna su Comisión Bicameral para tratar los procedimientos administrativos que demanda el nuevo Gobierno central, la voluntad de los diputados y senadores nacionales sigue siendo una incógnita. Desde los bloques mayoritarios adelantaron a EL LIBERTADOR escenarios posibles. No obstante, advierten que, dadas las circunstancias, la primera sesión podría fracasar. Milei se reserva el derecho al veto.
03-POLITICA-3Mientras avanza el plazo para el ingreso en vigencia del mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) para la desregulación del Estado que dictó el presidente Javier Milei, persisten las dudas respecto de si la iniciativa podrá votarse en el antes del 1 de marzo, más allá de que inicie su tratamiento en la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo.
Desde el Congreso se señala a EL LIBERTADOR que si bien el cuerpo parlamentario ha sido convocado para sesionar desde este martes hasta el 31 de enero de 2024, existen grandes posibilidades de que el primer cónclave no se concrete.
Según se señala, además de que el nuevo escenario político aún estaría demandando de una revisión profunda de las relaciones entre bloques parlamentarios, la mayoría de los legisladores tampoco tendría una postura orgánica unificada sobre el listado de once puntos que fijó el presidente Milei para dar inicio al contraste legislativo de las medidas que reclama el nuevo Gobierno.
A ello, según se indica, se suma la sorpresa de que el mismo no ha incluido el mega decreto que había generado todo tipo de especulaciones sobre su tratamiento hacia adentro de las fuerzas políticas.
BICAMERAL, EL PRIMER CONTACTO ENTRE BLOQUES
En este contexto, la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo que tratará el mega decreto protagonizará el primer contacto entre las nuevas fuerzas políticas que componen el Congreso nacional dentro de una discusión cerrada.
La Comisión tendrá 16 integrantes: ocho senadores y ocho diputados nacionales. Al respecto, la representación para cada una de las fuerzas políticas se define en función del sistema de proporcionalidad D’Hondt en base a los bloques.
Los ocho lugares para representantes del Senado estarán distribuidos de la siguiente forma: tres para Unión por la Patria (UxP), uno para La Libertad Avanza (LLA), uno para la UCR, uno para el PRO, uno para fuerzas provinciales, y uno para Cambio Federal.
En Diputados, en tanto, UxP reclama cuatro de los ocho lugares, aunque el oficialismo estaría dispuesto a concederle tres lugares de acuerdo al criterio de proporcionalidad. De esta manera, quedarían tres o cuatro lugares para UxP, uno o dos para LLA, uno para el PRO, uno para la UCR y uno para Cambio Federal (que será ocupado por Nicolás Massot).
Con esta distribución, el oficialismo teme que a priori se articule una mayoría en contra del decreto. Sin embargo, todo podría cambiar si el radicalismo reconsiderara la postura que explicitó en el comunicado de rechazo al hecho de que los centenares de reformas se dictaran por DNU y no a través de proyectos de ley a debatirse en el Congreso.
Para avalar la validez del dictamen se necesitan ocho de los 16 votos. De todos modos, el sentido del dictamen de mayoría es anecdótico ya que lo verdaderamente definitorio para saber si el decreto queda en pie o muere en el camino es el veredicto de los votos en el recinto de cada una de las dos cámaras.
Con que una sola de las dos lo avale, será suficiente para que el decreto de necesidad y urgencia conserve su vigencia. Para que quede sin efecto, en cambio, se precisa el rechazo de ambas cámaras.
Ganar tiempo
La Comisión Bicameral de Trámite Legislativo deberá pronunciarse sobre la validez o invalidez del DNU, pero La Libertad Avanza, que ejercerá la presidencia del cuerpo, buscará ganar tiempo ya que, según se señala, cuanto más tarde se tome una decisión, mayor será el impacto de las reformas ultraliberales y más difícil será revertir sus efectos. Eso mismo, dará al Gobierno tiempo valioso para generar alianzas con sectores de la oposición con espíritu colaboracionista.
La Bicameral de Trámite Legislativo, encargada de discutir los DNU, tiene la facultad de autoconvocarse cuando quiera. En ese sentido, el debate se podría iniciar apenas el decreto entre en vigencia el próximo viernes 29. Sin embargo, la comisión aún no está constituida y mientras el decreto no sea rechazado, estará en vigencia.
«Los procedimientos son legales»
Desde el bloque de La Libertad Avanza en el Congreso nacional enfatizaron a EL LIBERTADOR que todos los procedimientos impulsados por el Poder Ejecutivo de la nación son «constitucionales».
«La Comisión Bicameral sólo analiza las firmas, las formas y el procedimiento, si el proceso es necesario, urgente, o no lo es, es decir, si el contenido amerita el mecanismo, invocar al principio de inmediatez o no lo amerita», señalaron, y remarcaron: «Hay que tener en cuenta que hay plazos que cumplir, que son los plazos que marca la Constitución, porque la decisión que ya tomó el Presidente entrará en vigencia el viernes 29».
«Se votará en bloque»
Desde Unión por la Patria, se ha informado que, por el momento, no se promoverá posturas horizontales entre legisladores basadas en afinidades de origen. En su lugar, se establecerán únicamente con base en la representación del bloque. En términos sencillos, el bloque opositor no aceptará votos individuales y adoptará exclusivamente la estrategia de mantener la unidad de posiciones. En consecuencia, cualquier expresión de representación deberá ser acordada previamente con el Presidente.
«Entendemos que los votos de los legisladores que integran otros bloques se definen por su afinidad con el Gobierno central, al que hemos definido como totalmente opuesto a los intereses de los argentinos, por lo cual, todas nuestras expresiones serán unificadas», indicaron, y remarcaron: «Esto no quiere decir que, eventualmente, el bloque no estará abierto a una agenda regional, si la hubiere, pero eso jamás sucederá si lo que está en juego son los derechos conquistados».
«Colaborar con la gobernabilidad»
Pese a que el presidente del bloque de la UCR en Diputados, Rodrigo de Loredo cuestionó la extensión del DNU, los legisladores de la fuerza centenaria anticiparon a EL LIBERTADOR que su última posición se mantendrá dentro del mandato partidario que reclama a los legisladores «colaborar con la gobernabilidad».
En concreto, pese a que ha sido nombrado para ejercer en una posición destacada ante sus pares, la actitud del cordobés de llevar al extremo la creatividad para poder apoyar a un Gobierno nacional que recién despunta no sería compartida por todos sus correligionarios puertas hacia adentro de su partido y de su bloque.
Otro voto que colaborará para la gestión será el de Camau Espínola en la Cámara alta, que acompañará en sintonía con Schiaretti.
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