El diputado nacional de La Libertad Avanza, Lisandro Almirón, dialogó con EL LIBERTADOR, sobre las pautas que el presidente Javier Milei extendió al bloque oficial antes del tratamiento del Decreto de Necesidad y Urgencia y la Ley Ómnibus en el Congreso de la Nación.
El legislador aseguró que existe una buena predisposición de distintos bloques para el diálogo parlamentario para encontrar soluciones consensuadas y destacó la importancia de la aprobación de leyes para generar confianza y seguridad jurídica para la recuperación económica.
Almirón, además, opinó, que al tratamiento parlamentario se adherirá un profundo clima de auditoría sobre el manejo de los recursos públicos en los últimos años.
¿Cuáles fueron las pautas generales del encuentro?
-En líneas generales, él viene realizando reuniones periódicas, no solamente con el poder legislativo. El bloque de legisladores de La Libertad Avanza tiene reuniones de gabinete y con otros referentes políticos, así que está bastante empapado, comprometido con la situación que se genera tanto a partir del tratamiento del Decreto de Necesidad y Urgencia como de la Ley Ómnibus en los próximos días.
¿Cuál fue el punto central?
-Fundamentalmente, fijar la posición en materia económica que va a tomar el país en los próximos meses. Creo que, como todos nosotros lo sabemos, este es un año muy duro, difícil, y somos optimistas con lo que va a generar este profundo cambio que necesita la Argentina. Las medidas que se vienen tomando son necesarias. El decreto en general lo dice; algunas son necesarias y robustas, por eso la presentación en el marco normativo del decreto, y otras son importantes y lo es también resolverlo en extraordinarias para que Argentina encuentre el rumbo y reduzca la crisis en la que se encontraba el país. Son muchas cosas que se vienen trabajando, área por área, en reducción de la cantidad de ministerios, en compromiso con el achique y al gasto público de manera permanente. Se ha tomado cartas en el asunto de auditar, por ejemplo, Desarrollo Social, con cruzamiento de datos con beneficiarios de algunos programas y cuestiones que hacían a un desmanejo en el control de gastos. Pero también hubo un achique muy profundo en lo que fueron las primeras medidas económicas que nosotros sabíamos que iban a ser duras.
¿Hubo preguntas de los legisladores al presidente?
-Sí. Todas tuvieron que ver con el plan económico, los índices, preguntas de manejo, de qué actitud iba a tener la economía respecto de algunos países. Hubo ida y vuelta con los legisladores, con una actitud siempre positiva. El presidente no tuvo inconvenientes en responder de una manera muy respetuosa; él tiene una manera muy de la docencia, y en esos términos se maneja muy bien con los diputados, permanentemente está marcando conceptos y ayudando a entender a quien no es economista.
¿Cómo notó al presidente?
– Él, siempre, está muy comprometido con la parte económica, que es algo que tiene como norte; solucionar el problema de los argentinos. Básicamente, la reunión apuntó a eso, a darnos las herramientas necesarias para que la fundamentación de por qué se están tomando estas medidas, desde el punto de vista jurídico, técnico y político, de cómo salimos de esto. Fue un mensaje claro, la búsqueda de consensos es fundamental, el diálogo y el consenso, tener como norte la construcción de las mayorías necesarias.
Diálogo Nación-Provincia
Además del contacto del presidente y del ministro Franco ¿su bancada podrá será un contacto directo con el gobernador Valdés?
-No tengo trato con el Gobernador, sé que ya ha tratado con algunos sectores del gobierno, pero en lo personal no tengo trato, por nada personal, podría tenerlo, podría hablarlo, soy un diputado de la provincia y muy respetuoso de la investidura del gobernador.
En concreto, el contacto será Francos.
-El gobernador tiene relación, está claro, solamente con Francos, lo repito, es el gobernador de mi provincia, y soy muy respetuoso, y remarco, no tengo contacto porque no se ha dado. El ministro Guillermo Franco tiene diálogo con todos los gobernadores, y es sumamente respetuoso, tiene muy buen trato con el vicegobernador (Pedro Braillard Poccard) también. Es una persona que ha tomado el ministerio con absoluta responsabilidad.
Construir mayoría
Hasta el momento, ¿qué respuesta obtuvo de los bloques?
-Muy buena predisposición de los distintos bloques al diálogo. Por las cosas con las que no están conformes permanentemente acercan distintas alternativas, y se trabaja sobre eso, pero veo una muy buena predisposición a encontrar la salida a esto. Lo que es imperioso es sacar este paquete de leyes que hacen a la confianza, a la seguridad jurídica y a la necesidad que tiene la patria de mandar mensajes fuertes hacia el mundo y de manera interna, porque nuestra economía necesita que estén dadas las garantías para empezar a despegar. De alguna manera el dinero circulante era cuatro veces el debido, el circulante, la plata para las actividades económicas, cuatro veces más, en sus distintas formas, en bonos, acciones, títulos, por fuera del sistema, de lo debido. Esa es la inercia inflacionaria. Esto nos hizo mucho daño. Los bancos ya no invertían, terminaban prestando al Estado, y de vuelta al sistema financiero, en una espiral que no dejaba de agravar. Aumentó la miseria, la pobreza, la indigencia. Fueron veinte años de fracaso. Vi al presidente optimista, con ganas y muy comprometido.
¿Qué grado de compromiso ve en los legisladores que no son parte del bloque de LLA con este paquete de medidas?
-Los jefes de bloque están permanentemente, los observo en el trabajo, en propuestas, veo un trabajo de acompañamiento y todos estamos muy preocupados por la situación en la que se encuentra el país. Los números en lo que dejó el gobierno anterior son alarmantes. Los últimos números de las empresas del Estado son cosas que, con el correr de los días, se van a ir mostrando, área por área
Junto a este análisis legislativo en lo político. ¿se vivirá un clima fiscalizador, de auditoría a la gestión de Alberto Fernández?
-Es una etapa de auditoría, de fiscalización, es necesario saber cómo se han manejado en los últimos años. Los números hablan por sí solos, son índices de pobreza, de indigencia, de riesgo país, el precio del dólar, la situación en la que se encontraba el mercado cambiario, la SIRA, los dólares preferentes para amigos, para empresarios amigos. En esta Argentina que está transitando el país, hay una buena predisposición a cambiar radicalmente una visión de la economía y hay gente dispuesta a hacerlo. Los legisladores y funcionarios han tomado muy en serio el rol que les toca. Esta es una situación como nunca se dio en Argentina. Nunca en Argentina se dio que hubiera que desplegar normas que abarquen todo el espectro normativo del Derecho. Esta es una oportunidad única de salvar el país. No hay que cansarse de repetirlo. El país está en crisis.