Coincidente con la apertura del periodo ordinario de sesiones, la ex vicepresidente del Senado, Carolina Martínez Llano salió a respaldar, tanto en el orden nacional como provincial, la iniciativa de terminar con el festival de boletas adoptando la boleta única como forma de transparentar la voluntad del ciudadano.
«Corrientes debe estar a la altura de los tiempos», remarco la ex legisladora, quien puntualizó que, más allá de esta circunstancia, los partidos y frentes deben hacer realidad la democracia interna en la selección de candidatos que se expondrán a la ciudadanía. No sólo en el PJ hemos sufrido por años la abolición de los procesos participativos.
«El unicato o el ‘dedo’ no son buenos», apuntó, señalando que la irrupción de Milei quizás se deba a que los partidos tradicionales no han estado a la altura de las circunstancias y no han sabido contener a una sociedad que no venía viendo a los políticos con la agenda de las preocupaciones de la gente.
La ex legisladora peronista, Carolina Martínez Llano -que dejó la banca el 10 de diciembre último, después de dos mandatos en el Senado de la Provincia- volvió al ruedo ayer fijando posición en uno de los temas que se ha instalado por estos días en cuanto a la posibilidad de modernizar el sistema electoral de Corrientes, donde existe desde hace años una cuasi ley de lemas que desvirtúa al momento del voto la voluntad del elector.
Carolina se pronunció a favor de la implementación de la boleta única que rige en varias partes del país y que supone revalorizar al ciudadano en el derecho de elegir. «Lo vine sosteniendo desde siempre, marcando la contradicción que tienen las bancadas del PJ en el Congreso de la Nación que vienen bloqueando que también en el país haya mayor transparencia», dijo.
DEMOCRACIA HACIA ADENTRO
«Fortalecer el partido es la prioridad», manifestó la ex Senadora, quien destacó la importancia de que se dé un proceso de normalización ordenado que concluya en la legitimación de una nueva conducción que despeje definitivamente la injerencia del «dedo nacional» para decisiones que son responsabilidad excluyente de los peronistas de Corrientes.
«Ya en la última elección señalé que las listas debían ser encabezadas por peronistas y que, al menos una de las grillas, debía tener a una mujer. Si bien se contempló esta última aspiración, lamentablemente volvieron a disponer como bienes de difunto de bancas que pertenecen al peronismo, coronando por el partido personas sin justificación, en alianzas que difíciles son de explicar, más en una elección de medio tiempo», agregó.
«El desafío que tenemos por delante es recrear los ámbitos de debate, tanto en el partido a escala nacional como en Corrientes para definir los tiempos y las formas del proceso electoral que se viene, de modo que la unidad sea la consecuencia del voto de afiliado, que seamos conscientes de la necesidad de hacer las cosas de distinta forma si es que queremos resultados distintos», manifestó Carolina.
TRABAJAR POR UN GOBERNADOR O GOBERNADORA PERONISTA
Carolina consideró que en esta cuestión no puede haber dudas. «El escenario electoral que se presenta es inequívocamente de tres frentes electorales, si es que el oficialismo logra cerrar un candidato único», apuntó, descontando que el Gobierno nacional buscará un espacio propio en una elección que tiene una gran importancia nacional por ser en la mitad del mandato.
En lo que hace a las alianzas, «cada uno puede tener su opinión, pero la política que siga el partido debe ser definida el año que viene por el nuevo Congreso del partido, conforme a lo que resulte de la elección interna», dijo. Y añadió: «Hablar ahora de alianzas no corresponde. Sí dejar en claro que no debemos ser ‘furgón de cola’ en ningún frente electoral. Si algún compañero lo sugiere, desde ya debemos señalar que se trata de posiciones individuales que no representan al conjunto y que no hablan bien de la vocación de poder que el peronismo debe demostrar a la sociedad».
EL JUEGO DE LOS INTENDENTES
«El peronismo, por las malas estrategias y quizás por candidatos no taquilleros en el orden provincial se ha quedado con pocos intendentes genuinamente peronistas», subrayó Carolina. «2025 será muy difícil si no fortalecemos el partido ni logramos una oferta electoral provincial atractiva, porque por el efecto arrastre de la boleta podemos sumar muchas intendencias más o quedarnos sin ninguna, si subestimamos la necesidad de recomponer un núcleo duro de conducción con clara vocación de poder», aseguró.
UN 2024 COMPLICADO
La ex Senadora señaló que «se vivirán tiempos difíciles». «Ojalá Dios ilumine a los gobernantes y a la oposición para encontrar caminos de entendimiento tan necesarios para dar respuesta a quienes más sufren las consecuencias del ajuste. A mí me preocupa la situación de los jubilados y de los sectores más vulnerables, con menos capacidad de aguantar. Ni más ni menos de lo que viene diciendo el Papa Francisco», indicó.
EL TRABAJO DEMOCRÁTICO
«Es difícil hacer política partidaria en medio de la crisis social que es una realidad», destacó Carolina.
«De todas formas, lo importante es salir, conversar y ver entre todos cómo vamos a encarar el proceso de relegitimación partidaria. La idea es terminar 2024 con un partido ordenado que pueda hablar en nombre del peronismo«, opinó para remarcar que es necesario que el justicialismo «se haga cargo de la estrategia, la redefinición del discurso y en su momento de las alianzas, aunque para ello será fundamental esperar las reglas de juego que vayan a regir».
«Un sistema electoral de doble vuelta como hay en Corrientes, con tres frentes fuertes, podría reeditar lo que pasó en el orden nacional. Como peronistas debemos abogar por capitalizar la posibilidad de quedarnos con el Gobierno, lo cual no es una misión imposible», sostuvo.
EL CASO DE DANIEL SCIOLI
Carolina calificó como lamentable que el ex Vicepresidente de la Nación y ex Gobernador de Buenos Aires haya aceptado formar parte del Gobierno central.
«Quiero dejar en claro que los peronistas debemos trabajar, tanto en Corrientes como en el resto del país, para volver a ser opción de poder. Tenemos pendiente una autocrítica, pero no podemos arriar las banderas de la lucha, lo que no implica hacer una oposición por la oposición misma ni asumir posiciones radicalizadas que conspiren contra la esperanza de millones de argentinos que han votado por las propuestas del Gobierno. Está claro que algo habremos hecho mal para que la gente no nos acompañe, y también que es nuestra obligación someternos a la soberanía del voto sin que ello implique dejar de trabajar, de cara a la gente, para recuperar la confianza en el tiempo que se viene», aseveró.