El Ministerio de Capital Humano, a cargo de Sandra Pettovello, realiza un relevamiento de los comedores para asistirlos con fondos.
El resultado arrojó: “Hasta el momento, el 55% de los comedores relevados no existe”. A su vez, del total de 44.314 comedores inscriptos en el Registro Nacional de Comedores (Renacom), apenas el 10%, unos 4.430 fueron ‘matriculados’ por la administración del Frente de Todos y solo 2.314 recibían asistencia por parte del Estado porque así lo requirieron, según el informe al que accedió Infobae.
Las razones por las cuales quitaron la “intermediación” de los piqueteros en el reparto de la comida y genera tensiones. “Pelean por la caja de los alimentos”, sostienen desde Casa Rosada.
A partir de ahora, al parecer, ese 4,2% de la ayuda alimentaria ya no será manejada por los dirigentes sociales. El 50% de ese monto total, que era de casi 80 mil millones de pesos, será vehiculizado a través del Programa Alimentar Comunidad. Una especie de tarjeta de prepago a través de la cual los responsables de los comedores debidamente acreditados, se les girará dinero para la compra no solo de arroz, fideos y yerba, sino de otros alimentos de mayor contenido proteico como lácteos, carnes, verduras, frutas y hasta alimentos para celíacos si es necesario.
Según lo que se supo, la idea es que cada comedor compre lo que necesite, no lo que el Estado quiera”, explicaron desde la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, la continuadora que Desarrollo Social que está bajo la órbita de Capital Humano. También recalcaron que los gastos “deberán ser rendidos para continuar con el beneficio. De esta manera, además de agregar valor nutricional a las comidas, existirá “transparencia” y trazabilidad de los alimentos” y a quiénes llegan, ”un hecho que hasta ahora no ocurría”. El otro 50% será destinado a una reserva para casos de emergencias como inundaciones u otros casos extremos como incendios y otras catástrofes.