La conducción de la Unión Tranviaria Automotor (UTA) amenazó ayer con un paro por tiempo indeterminado en Corrientes si no se llega a un acuerdo salarial en la reunión del martes, con representantes de la Federación Argentina de Transporte del Automotor de Pasajeros (Fatap).
Por un lado, la UTA propone un aumento del 83.6% sobre un salario básico de $537.000 en el periodo de enero y marzo, incluyendo $4.087 de viáticos diarios. Mientras que el empresariado se resiste a aceptar la propuesta.
Al igual que en las últimas reuniones, los empresarios manifestaron no contar con recursos para hacer frente al reclamo sindical y no presentaron ninguna oferta. Por otra parte, los choferes consideraron que el salario «no es un costo» para ajustar y dijeron ser rehenes de intereses ajenos.
Con el cambio de Gobierno nacional, se produjo un punto de inflexión en un servicio castigado desde hace años, que subsistía fundamentalmente por subsidios. La actual gestión decidió eliminar el fondo compensador del interior -principal fuente de ingresos para las empresas del interior del país- y aplicó una fuerte devaluación.
El resultado de las medidas se trasladó directamente al precio del boleto y el funcionamiento del servicio en muchas ciudades, aunque, para las empresas, estas medidas parecieran no ser suficientes en el contexto actual.
El secretario general del gremio en Corrientes José Luis Sabao mencionó además que el Procedimiento Preventivo de Crisis presentado por la Fatap había sido rechazado debido a que «está incompleto y no corresponde a la situación actual».