Un hermano de la víctima, Franco Romero, habló esta mañana y dio detalles de la sangrienta escena que presenció en la vivienda del barrio Jardín Florido, el sábado, en que tres policías se vieron involucrados en un confuso episodio que terminó con uno de ellos muerto a balazos y Bárbara Romero gravemente herida por arma de fuego y a puñaladas.
Franco, el hermano mayor de Bárbara (28) quien continúa internada en el hospital Escuela tras haber recibido al menos tres disparos en el ataque, reveló que ella fue nuevamente intervenida quirúrgicamente en la mañana de ayer por el disparo que recibió en el abdomen, y le suturaron la herida. Se trata de la tercera operación en seis días y su estado de salud sigue siendo grave, ya que como lo informó EL LIBERTADOR la mañana del hecho, recibió tres disparos en zona delicadas del cuerpo: muy cerca del corazón, otro en el hígado y un tercero cerca de la columna. “Esta grave; ahora hay que esperar la evolución de la intervención de ayer, ella continua en estado de coma”, contó Franco y remarcó que la familia mantiene la férrea esperanza en su recuperación.
Romero agradeció a quienes donaron sangre y oraron por la salud de Bárbara.
Sobre la relación de la joven con el agresor, David Medina, quien se encuentra detenido, comentó que no sabía mucho sobre el vínculo que mantenían, era una persona “muy reservada”. Sin embargo dio otro detalle, que en un momento la familia le pidió que “se aleje” (de Medina), porque en el “último tiempo estaban peleando, hubo un episodio de violencia, y nos acercamos a ella y le pedimos que se aleje… le hizo escenas de celos”, aunque recordó que la ex pareja “era muy bueno con la familia”.
Franco Romero, mencionó que él estuvo en la casa donde ocurrió el hecho, llegó minutos después del brutal ataque y vio a Alfredo Molina (hijo del jefe de la Policía) todavía con vida y lo escuchó pedir que atiendan a su hermana Bárbara, “que se la llevaran, que la ayudaran”. “Era la persona que más quería a mi hermana”, sostuvo en diálogo con radio Sudamericana.
La joven, lleva cinco años de trayectoria como Policía y además estaba estudiando la carrera de Abogacía, su padre es comisario retirado, Franco es integrante del Servicio Penitenciario y otro de los hermanos integra la Prefectura Naval Argentina.
Fotos :archivo