Mañana se cumplen diez días del ataque a balazos y a puñaladas a la oficial de Policía Bárbara Romero (28), por parte de su ex pareja, lo que le costó la vida a otro joven de la fuerza, Alfredo Molina. La joven sobrevivió a los disparos, sin embargo su estado de salud es delicado.
Consultado el director del Hospital Escuela General San Martín de la ciudad de Corrientes donde se encuentra internada, el doctor José Romero detalló que la joven “continúa estable, con tubos de drenaje y todavía requiere respirador, por lo que está dormida, mejorando muy de a poco”.
La paciente, como se sabe fue operada de urgencia la mañana del sábado 13, por tres disparos en zonas delicadas de su cuerpo y durante la semana fue sometida a nuevas cirugías.
En ese sentido, el doctor Romero no descarta otra intervención. Explicó que al haber vísceras perforadas, “siempre se requiere continuos lavajes para evitar infecciones así que lo más probable es que es que requiera una nueva intervención quirúrgica”.
Finalmente el médico remarcó que Bárbara “se encuentra sedada, sigue estando igual que el viernes, se le va sacando las drogas de a poquito todos los días por lo que algo responde, tenemos que ver su evolución”.
En tanto el agresor, David Medina, continua detenido con prisión preventiva por 120 días y fue imputado por «homicidio calificado por el uso de arma de fuego», por la muerte de su compañero Alfredo Molina (hijo del actual jefe de esa fuerza, comisario general Arnaldo Molina) y en el caso de Bárbara Romero, acusado por «homicidio en grado de tentativa calificado por el vínculo, por el contexto de violencia de género y por el uso de arma de fuego”.
La causa está a cargo de la Ufic (Unidad Fiscal de Investigaciones Concretas) de Capital, encabezada por Lucrecia Troia Quirch.
Con datos de radio Sudamericana