Atemorizados por un grupo de menores de edad armados con gomeras, más conocidas como “hondas”, vecinos del barrio Laguna Seca de la ciudad de Corrientes recurrieron a la Policía que intensificó el patrullaje y secuestró un número importante de este arma considerada una de las más antiguas de la humanidad.
Así, los uniformados lograron reducir los ataques de un grupo integrado en su mayoría por menores de edad que sembraba el terror en el barrio. Los testimonios indican que se dedicaban a romper vidrios de ventanas, destruir luminarias e incluso agredirse entre ellos.
Los efectivos del Grupo de Respuesta Inmediata Motorizada Grim 2, secuestraron más de una decena de gomeras en distintos procedimientos.