Una familia tipo correntina necesitó en abril más de 700 mil pesos para cubrir la Canasta Básica Total (CBT) y no estar por debajo de la línea de la pobreza. La Canasta Básica Alimentaria (CBA), que marca el parámetro de indigencia, rozó los 325 mil pesos durante el mismo mes.
Las cifras fueron informadas por la delegación correntina del Instituto de Investigación Social Económica y Política Ciudadana (Isepci), a través de su Índice Barrial de Precios (IBP), que refleja el costo de vida con respecto a la alimentación saludable y los servicios esenciales para el bienestar de cada familia.
Datos relevados
El último IBP indicó que un grupo familiar, compuesto por dos adultos y dos niños, precisó 701.288,93 pesos para cubrir la CBT y no ser pobre, luego de que en el cuarto mes del año se identificara un aumento del 7,25 por ciento (47.390,75 pesos). Dicha canasta incluye necesidades básicas como alimentos y otros productos y servicios de salud, educación, transporte, alquiler, luz, agua, teléfono, Internet y vestimenta.
El mismo tipo de grupo familiar requirió 324.670,80 pesos para la CBA, que incluye los gastos para alimentarse adecuadamente, tras una suba del 6,25 por ciento durante el mes pasado (19.110,90 pesos).
Si se comparan los valores mencionados interanualmente, con los de abril de 2023, según el Isepci se identificó un aumento del 277,70 por ciento en la CBT y del 289,94, en la CBA. Es decir que, para no ser considerada pobre, una familia debió tener 515.615,8 pesos más de ingresos que hace un año y para no caer en la indigencia, 241.409,34.
Por otra parte, desde diciembre de 2023 el costo de la CBT subió un 48,09 por ciento, lo que representa 227.723,61 pesos. Por su parte, la CBA se encareció un 44,66 por ciento, es decir 100.232,26 pesos.
Análisis de las cifras
Siguiendo los resultados de abril, la referente del Isepci en Corrientes, Silvana Lagraña expresó: “El IBP refleja, por un lado, una desaceleración en los precios de los alimentos por la fuerte retracción del consumo. Debido a la caída de las remuneraciones, jubilaciones y otros ingresos de las familias, que ya se encontraban en niveles muy bajos”.
Luego, continuó: “Por otra parte, se dió un incremento en la canasta básica total, que como lo advertimos se va sostener por las grandes subas en tarifas de servicios como en el transporte, educación, comunicación, energía, agua y gas. Debido a la quita de subsidios y precios de referencia en los mismos”.
Posteriormente, señaló que la situación actual “es muy preocupante, ya que nos encontramos en un contexto de recesión de la actividad económica, gran pérdida de los ingresos de los hogares, fuerte caída del consumo, aumento de la informalidad laboral, despidos masivos y con ajustes fiscales insostenibles en el mediano plazo”.