María y José, los padres de Loan, presentaron un escrito ante la jueza Federal de Goya, Cristina Pozzer Penzo, pidiendo un certificado que los libre de sospecha en la causa por la sustracción de su hijo.
En su presentación, los padres solicitaron una «certificación» de que no están «denunciados ni sospechados ni imputados en esta causa», para presentarla ante la Justicia Criminal Competente y la Justicia Civil, y someter a proceso a quienes los han agraviado. «Seguimos luchando a diario para que aparezca con vida y sano», dijeron. «Hasta el día de hoy ignoramos innumerables circunstancias de cómo pudieron haber sucedido los hechos en la realidad», indicaron.
También denunciaron que han sido señalados, imputados y acusados públicamente por su ex letrado de ser sospechosos o cómplices del delito. «Inédito. Nos acusa de ‘entregar a nuestro hijo'», remarcaron. Y adjuntaron links sobre los dichos en medios nacionales e internacionales.
Además, plantearon que su hijo, José, ha sido acosado incesantemente en su teléfono particular, lo que interpretan como ciberacoso. «Esta forma de acoso incluye difusión de información falsa, mensajes intimidantes e invasión de la privacidad de José, que está profundamente angustiado por la falta de respuestas en la búsqueda de su hermano y ni siquiera atina a reconocer o denunciar estos graves hechos que lo afectan psicofísicamente», explicaron.
Por ello, pidieron a la jueza que expida certificación sobre la inexistencia de su vinculación en la causa como «imputados o simplemente denunciados» y que se cite a su hijo José a ratificar la denuncia de acoso. «Para que se explaye sobre los hechos, personas, horarios, llamadas y contenido de dichas comunicaciones reseñados en nuestra manifestación, entendiendo que dichas acciones infieren daño psicofísico sobre nuestro hijo que se encuentra en estado de vulnerabilidad», aseguraron.