La crisis agobiante de la economía de los argentinos ya supera el límite de toda fuerza, porque no logran ver ni a lo lejos una mejora en su situación cotidiana, sin alimentos saludables y sin poder tener una asistencia médica o farmacéutica óptimas, aunque los números de la macroeconomía entusiasme y enorgullezca a la Administración Milei, situación adversa que tampoco los comerciantes dejan de sufrirla.
El presidente de la Cámara de Comercio de Santo Tomé, Román Naya, habló del desalentador panorama del comercio local debido a la constante suba de precios, lo que hace que los brasileños hayan dejado de venir, y que el consumidor local realice sus compras en Brasil, «una doble combinación que termina siendo letal para nuestros comerciantes», advirtió y sostuvo que «la única forma de salir de esto es que nuestros precios bajen un 50 o 60 por ciento para poder ser competitivos, se devalúe la moneda para que el peso sea competitivo; o que se aumenten los salarios en un 100 por ciento, todo lo que es muy difícil que suceda», reconoció, casi como un objetivo idealizado.
En otro aspecto, también se refirió a la crisis que atraviesa el sector foresto industrial, informó el portal Digital Santo Tomé.
UN COMERCIO
ESPECIAL
Naya, indicó que «el comercio de frontera es un comercio especial porque tiene sus propios condimentos al tener un mercado en frente, que a veces se atiende y a veces se vuelve competencia y eso le da otra dinámica a los pueblos de frontera, como Santo Tomé. En estas dos décadas tuvimos una dinámica de mucho consumo y seguimos con una dinámica en alza porque tenemos una moneda nacional devaluada y una moneda extrajera más fuerte, lo que hace que la Argentina siempre sea atractiva comercialmente hablando y eso lo notamos los fronterizos en el intercambio comercial diario. Cuando nuestros productos tienen un buen precio para otros mercados, nos damos cuenta porque vienen masivamente los brasileños a comprar pero a veces no es así y hoy estamos viviendo lo contrario. Es decir, hay una apreciación del peso respecto al dólar pero sobre todo hay una constante suba de precios, que si bien disminuyó un poquito últimamente, todavía hay subas mensuales, lo que hace que se complementen dos cuestiones que tienen que ver con que nuestro peso toma valor y como nuestros productos en pesos se revalorizan y la moneda extrajera, llámese dólar, real, peso chileno, peso uruguayo o guaraní se desvaloriza frente a esos productos, lo que quiere decir que cualquier extranjero con su moneda necesita más para adquirir el mismo producto argentino en relación a otros años».
Explicó que esa situación «tiene sus picos, porque notamos en los primeros tres o cuatro meses del año, con un dólar muy bajo y nuestros precios elevados, que el consumo extranjero prácticamente desapareció, y no sólo eso, sino que además, el consumidor de la Argentina se va a hacer sus compras en los países vecinos, como en este caso Brasil, por lo que podemos decir que hay un doble impacto para el comercio local en todas sus versiones, prácticamente», lamentó.
«El único país de
Sudamérica con esta caída del PBI»
SANTO TOMÉ. Respecto a la situación concreta en la ciudad, el presidente de la Cámara de Comercio, Román Naya, expresó: «No sólo que venimos perdiendo meses tras meses el mercado externo que se atendía, sino que comienza una sangría del consumidor local que se va a comprar en otro mercado, y esto se da cuando el dólar está bajo y que el real y otras monedas extranjeras acompañan, mientras que nuestros precios siguen subiendo».
UN COMBO NEGATIVO
«Esta doble combinación termina siendo letal para nuestros comerciantes, y como si no bastara, hay que sumarle un tercer componente, que es el mercado local depresivo porque estamos viendo en estos 10 meses del nuevo Gobierno que todos los índices de consumo y de industria son negativo con una caída del Producto Bruto Interno (PBI) del 3,5 por ciento promedio. Somos el único país de Sudamérica con esta caída del PBI y eso quiere decir que hay mayor desocupación porque las empresas se ven obligadas a despedir gente o a cerrar directamente, lo que hace que aumente la desocupación, la pobreza, la indigencia; todo esto es un combo que repercute de manera directa en la industria y el comercio del país; y en los lugares fronterizos con esta valorización del peso con respecto al dólar se termina generando un combo perfecto para que el consumo local se traslade a países vecinos», señaló.
«Todos los rubros
vienen en franca baja»
SANTO TOMÉ. El representante mercantil Román Naya, comentó que desde la Cámara de Comercio «siempre se analiza el panorama que, por ahora al menos, es desalentador».
Agregó que «lo que pasa es que con todos los índices de estos 10 meses: caída del PBI, aumento de los precios, aumento de la desocupación y la pobreza, etcétera, es difícil modificar la situación a nivel local, porque es una cuestión micro, en el sentido que atañe a todo el país de manera individual. Todos los rubros vienen en franca baja, a no ser lo que son las mineras, las pesqueras, todo lo que es lo bursátil; y el campo, que está teniendo unos rindes interesantes que hace que la caída sea menor, pero todo el resto está sumamente complicado», afirmó.
.