Textos: Graciela Villalba
Fotos: Luis Gurdiel
Corrientes se ubicó octavo en el medallero de los últimos Juegos Evita 2024 y de la experiencia participaron numerosos jóvenes de toda la provincia, cada uno con sus historias, anécdotas y sobre todo sueños.
Este es el caso de Bruno Galarza, de 16 años, de la escuela Normal José Manuel Estrada, que participó en atletismo adaptado y obtuvo cinco medallas: dos de oro, dos de plata y una de bronce, convirtiéndose en el único correntino con tantos reconocimientos.
En diálogo con EL LIBERTADOR, el joven, acompañado de su entrenador, profesor Rodrigo Soto, relataron los detalles de la consagración.
Bruno, participó en las pruebas de atletismo adaptado en: lanzamiento de bala; salto en largo y en 1.500 metros, 100 metros y 200 metros.
«Es la primera vez que participé, el profesor me propuso y me puse a entrenar después de clases», relató el joven que usa lentes de contactos por su miopía.
Continuó: «Participé con otros chicos de distintas provincias. Yo no podía creer traer tantas medallas. En mi casa no tengo dónde colocarlas».
TALENTO Y SOLIDARIDAD
Más allá del talento, entrenamiento y dedicación de Bruno, sus galardones estuvieron impulsados con la solidaridad de un compañero de habitación que le prestó las zapatillas apropiadas para la disciplina.
«Realmente tuvimos una suerte bárbara, porque yo compartía la habitación con Bruno y con otro chico más que estaba participando por el Centro de Educación Física Nº 18, alumno Josías Piedrabuena de la colega María Laura Campuzano. Y bueno, coincidió que las zapatillas que tenía que utilizar Bruno, en 100 metros y en 200 metros, son zapatillas especiales con clavos, eran el mismo calce que él», describió.
A lo que continuó: «Entonces, bueno, gracias a la buena voluntad de esa persona que estuvo con nosotros, se las prestó para hacer las pruebas y bueno, yo también le presté mis zapatillas para que haga las pruebas de 1.500 metros, porque son zapatillas muy caras y él no se fue preparado, fuimos con zapatillas normales, pero bueno, tuvimos la suerte de que esta buena gente que estuvo con nosotros nos facilitó».
Sostuvo que si bien, Bruno de igual manera podía participar con el calzado normal, sin dudas que las zapatillas con clavos sacaron ventaja porque son las adecuadas para la categoría en la que participó.
El apoyo y acompañamiento a jóvenes talentos
El profesor Rodrigo Soto vio en Bruno un potencial y apostó a ello: «Vimos que tenía condiciones cuando hacíamos las entradas en calor y trabajamos en la pista y ahí lo descubrimos».
Continuó: «Dos meses estuvimos en entrenamiento regularmente. Ellos tienen dos estímulos semanales y Bruno hizo un esfuerzo porque se quedaba después de clases, traía su mochilita, una fruta y hacíamos los entrenamientos».
Agregó que el chico «hizo un buen torneo en el zonal y bueno, en el provincial mejoró marca».
Por su parte, la vicerrectora de la escuela, Rosalía Cardozo manifestó: «Con toda la humildad que le caracteriza nos representó y hoy lleva el emblema del deporte, resurgió el deporte regionalero en él, cosa que hace años lo teníamos ahí en el banco».
Agradeció al gobernador de la Provincia, Gustavo Valdés, como así también al equipo directivo y a quienes aportaron a la causa como: el profesor Hugo Acevedo que le hizo la remera a Bruno, sin cobrar nada, sabiendo que no se podía llegar tal vez a hacer la participación.
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