Un grupo de artistas llevan adelante la restauración del icónico mural de la Correntinidad ubicado en la explanada del puente General Belgrano. Las tareas comenzaron a fines de agosto y se estima que finalicen a mediados de diciembre.
«Hemos retomado por iniciativa del Municipio, y a través de una empresa que es la que pone toda la logística», contó en diálogo con EL LIBERTADOR, José Kura, integrante del equipo de artistas a cargo de los trabajos de restauración.
El mural tiene una extensión de 325 metros lineales por 10 metros en la parte más alta. «Estamos a más de 200 metros ya concluidos, ponele 220 o 230 metros», indicó y que «esto no es sólo a merced de una persona, sino que hay un equipo de trabajo donde están artistas jóvenes como Ailén ‘Chaco’, Guadalupe Morlio, Agustina Nadal, Marcos Kura, y obran de asistente Edid Martínez y Gabriel Kura».
Además, informó que se han incorporado de manera eventual artistas invitados como José Mizdraji, y Virginia Schauvinhold. «En cada paño hay artistas invitados, son jóvenes y están haciendo sus primeras pinceladas, y gracias al equipo conformado hemos llegado a este metraje interesante del mural «, dijo.
Kura anunció que las tareas de restauración estarían finalizadas a mediados de diciembre. «Antes de las fiestas estaríamos cerrando el mural de la Correntinidad. Es un mural que no se basa en hacer grandes figuras sobre un fondo, sino que es un mural que tiene imágenes muy complejas, con muchas diagonales, con un trabajo de colorista muy importante», y que «todo esto por supuesto que requiere tiempo, mucha preparación, aparte la mayoría de la superficie del mural es en altura, también es un punto que no está a favor, porque tenés que subir, bajar, mirar de abajo lo que hacés, rectificar, es un trabajo que tiene su desafío».
Un desafío en cada proceso
En los procesos de restauración, Kura relató que «hay un sector muy grande, que es el que da hacia la Cuenca, que prácticamente se ha extinguido, todo lo que en algún momento fue pintado está borrado por el moho, la humedad, los rayos ultravioletas, y esa es la parte que nos toca ahora pintar de nuevo». A su vez, resaltó que los artistas cuentan con los equipos de seguridad y herramientas correspondientes: «En altura estamos con arnés, con protección por cualquier eventual caída, también trabajamos con extensores que son una especie de barras de dos o tres metros que en la punta le ponemos el pincel y vamos pintando porque hay momentos de mucha altura, y los tablones no están pegados a la pared, sino que están a 30, o 40 centímetros».
Con lazos particulares y generales
Se recuerda que José Kura es uno de los artistas a cargo de la restauración y partícipe de su realización. «Soy el más viejo, el más antiguo, fui uno de los primeros del grupo de Arte Ahora en aquel entonces en el 96 de las gestiones para la realización de este mural», recordó. Esta obra fue pintada por artistas locales entre 1996 y 1997, y resalta distintos pasajes de la historia y la cultura de Corrientes. «La parte que me parece la más completa, lograda, que tiene como más mensaje y cosas muralísticas, es la parte central donde hay un enorme Cristo y está la Virgen de la Merced, San Luisito y hay una peregrinación. Creo que ese paño es no sólo el más grande, sino un paño muy significativo», contó.
.