La Policía de Corrientes allanó una estancia donde se hallaron más de 60 animales robados a distintos productores de Goya.
La semana pasada, la Policía interceptó un camión en el que transportaban animales sustraídos. Ahora, las autoridades registraron el campo usado para ocultar el ganado hurtado a productores de la zona. El chofer de un transporte de carga y un comisionista quedaron seriamente comprometidos en la causa investigada, aunque ninguno de ellos está detenido y esto generó un gran malestar en hacendados de la región.
El pasado lunes 18 de noviembre, una patrulla policial de la Unidad Especial de Seguridad Rural y Ecológica, con asiento en Goya, detectó la circulación de un camión, tipo jaula, sobre Ruta Provincial 83. Los uniformados interceptaron al vehículo marca Ford, modelo Cargo 1722, cargado de un total de doce animales vacunos.
Ante el pedido de papeles, el camionero manifestó no tenerlos. Debido a la falta de guía, los permisos respectivos y otras irregularidades, le comunicaron sobre el inicio de un proceso judicial por «transporte irregular». De manera preventiva y sin dejar de lado las sospechas de que los vacunos podrían ser sustraídos, los llevaron a un campo cercano para la identificación de marcas y señas.
El procedimiento terminó de confirmar que los doce animales pertenecen a productores ganaderos del departamento, quienes realizaron las respectivas denuncias de robo días antes.
El camionero que no pudo presentar documentación que acreditara la propiedad de los animales afirmó, en un intento de desligarse de la situación delictiva, que los animales pertenecían a un productor local. La persona mencionada sería un comisionista que explota un campo para el movimiento de ganado en el negocio de la compra y, principalmente, de la venta.
La hacienda interceptada en el control policial iba a ser llevada a un establecimiento alejado de los lugares donde ocurrieron los ilícitos. Aquel operativo de rutina tomó de sorpresa al camionero y al comisionista identificado como Daniel Z., quien justo en un día feriado despachó los vacunos desde la firma Santa Rita, ubicada en el Paraje Santillán.
En el delito quedaron «pegados» el transportista, quien dijo no saber del abigeato, y Daniel Z., apuntado directamente como principal responsable. Días después la estancia Santa Rita fue allanada dos veces con sendas órdenes judiciales y el comisionista resultó demorado.
En el primer allanamiento constataron otros catorce vacunos con marcas adulteradas y que serían producto de distintos ilícitos actos bajo la modalidad de cuatreros. En un segundo allanamiento, la Policía Rural, con un médico veterinario, peritos y testigos repitieron el conteo de todos los animales existentes en el campo y volvieron a notar que otros treinta y cinco vacunos también «presentaban adulteración en sus diseños de marca y señal».
Todos los vacunos fueron secuestrados de forma preventiva, llevados a otro campo y quedaron a disposición de la Fiscalía Rural a cargo de Omar Cáceres.
Respecto a las personas sospechadas no están detenidas. El comisionista, si bien estuvo demorado, volvió a quedar en libertad apenas concluyó el primero de los allanamientos.
En la maniobra de abigeato habría varias personas más involucradas. Se trataría de peones que movían el ganado y respecto a ellos la Justicia deberá determinar si lo hacían siguiendo meras directivas o a sabiendas de la ilegalidad de sus actos.