Argentina sumó una nueva medalla en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020. El nadador Fernando Pipo Carlomagno se subió al podio con la Plata, en la prueba de 100 metros espalda de la categoría S7.
El rosarino de 28 años, que había logrado el mejor tiempo en las tandas de clasificación de natación, marcó un tiempo de 1:08.83 y llegó en segundo lugar, por detrás del ucraniano Andrii Trusov, que se alzó con el Oro al registrar un nuevo récord mundial con 1:08.83. Tercero quedó el israelí Mark Malyar, con 1:10.08.
Hubo otros dos participantes argentinos en la prueba por medallas que se desarrolló en el Centro Acuático de Tokio: el neuquino Iñaki Basiloff quedó sexto (1:15.00) y Lucas Poggi, oriundo de Villa Urquiza, logró el octavo lugar (1:15.22). Ambos recibieron diplomas paralímpicos.
“Fue una carrera muy dura, sabía que el oro y la plata iban a estar en centésimas. Hice una buena carrera pero cometí un error, me quedó un poco larga la vuelta y me costó recuperarla. Dejé la vida para ver si podía acercarme y lograr una remontada histórica, pero estas carreras se definen en detalles y el que menos se equivocara iba a ganar. Y le toco a él”, destacó el nadador. Y agregó: “Me voy feliz con una medalla de plata en mis segundos Juegos Paralímpicos”.
De las tres medallas conquistadas por el país, la primera la consiguió la entrerriana Antonella Ruiz Díaz, que ganó el Bronce en la categoría lanzamiento de bala F41 con un intento de 9.50 metros, y también Yanina Martínez consiguió el tercer lugar en el podio, luego de su gran actuación en la final de la carrera de 200 metros (T36) que se corrió en el Estadio Olímpico de la capital japonesa.