San Martín de Corrientes hizo bien los deberes en casa y terminó abrochando en forma indiscutida la clasificación a las semifinales de la Liga Nacional de Básquetbol, dejando atrás a Gimnasia de Comodoro Rivadavia, con un inapelable 3 a 1.
En el último juego disputado en el Fortín Rojinegro, los dirigidos por Diego Vadell se impusieron 74 a 67, quedando de esa manera en el selecto grupo de los cuatro que lucharán por el título.
El gran mérito de San Martín, además de ganar los dos juegos en casa, fue haber robado un partido en el Socio Fundadores, justo en el cotejo que abrió la serie, ganando 85 a 80, fundamentalmente porque los sureños exhibieron la localía más fuerte entre todos los equipos de la temporada y como habían finalizados terceros en la fase regular y San Martín séptimo, eran a priori los favoritos en la llave.
Pero San Martín sacó a relucir su oficio y protagonismo y sigue adelante en la competencia.
El jugador más destacado en San Martín en el éxito del domingo por la noche sobre Gimnasia fue sin duda alguna Emiliano Basabe, quien en 20 minutos en cancha ofreció una planilla con 17 puntos (8 de 8 en dobles y 1 de 2 en simples), 4 rebotes y 1 asistencia.
Con el primer objetivo cumplido, denotó toda su alegría, expresando: «Estamos muy contentos, disfrutando y cayendo de la buena serie que hicimos, del rival que le ganamos» y agregó: «Lógicamente contentos de meternos entre los mejores cuatro por segundo año consecutivo».
Para Basabe, «tácticamente hicimos una serie muy buena», puntualizando que a Gimnasia le «costó mucho atacarnos en cinco contra cinco, se hicieron fuertes en los rebotes y tuvieron más posiciones que nosotros, pero después creo que le encontramos la vuelta de defender y nos sentimos cómodos de ahí».
Seguidamente, el alero manifestó que este logro es «un premio para todos, para el cuerpo técnico, dirigentes y jugadores, que venimos desde hace años apostando a tener una base, por suerte está saliendo bien y da sus frutos».
Y con pleno optimismo, siempre respetando a los rivales, Basabe dijo a modo de final: «Tenemos todo el derecho a ilusionarnos y pensar en grande. Lo que viene será durísimo, pero estamos listos para el desafío».
.