El equipo de Battaglia sumó la 16º copa nacional de su historia. Marcos Rojo, con mucha ayuda de Marinelli, abrió la cuenta cuando se moría el primer tiempo. En el segundo, en el mejor momento del Matador, Fabra se inventó un verdadero golazo. Vázquez puso el tercero cuando ya estaba todo definido en Córdoba.
Un blooper rival le permitió romper la paridad y una virtud propia, definir el encuentro. Gracias a un error de Marinelli y un golazo de Fabra, Boca le ganó 3 a 0 a Tigre -Vázquez puso el tercero sobre el final- y se consagró campeón de Copa de la Liga. El equipo de Sebastián Battaglia llegaba inmerso en dudas por su nivel futbolístico y su incierto futuro en la Copa Libertadores, pero en la final disputada en Córdoba se mostró superior a los dirigidos por Diego Martínez y pudieron festejar la 16º copa nacional de su historia.
Por Tigre, que vio concluir su sueño de convertirse en campeón apenas ascendido a la Primera División, el destino no estuvo de su lado. No sólo por el error de Marinelli justo cuando se terminaba el primer tiempo, sino porque cuando mejor jugó, incluso acorralando a Boca contra su arco, apareció la jerarquía de Fabra en su máxima expresión.
Fuente: Página 12