Más de cuarenta activistas de Greenpeace participaron este lunes de un reclamo contra los desmontes en la provincia de Chaco. Diez de ellos se colgaron durante varias horas en el puente General Belgrano, que une a Corrientes con el Chaco, a más de 30 metros de altura.
A pesar de que desde noviembre de 2020 en la provincia de Chaco están suspendidos los desmontes por un fallo de la justicia provincial, la deforestación continúa y en menos de dos años fueron arrasadas más de 42 mil hectáreas de bosques nativos, una superficie equivalente a dos ciudades de Buenos Aires.
“La provincia de Chaco ya perdió la mitad de sus bosques y ahora, a través de un decreto, el gobierno propone validar los desmontes que se realizaron ilegalmente y permitir la deforestación de un millón de hectáreas más, con el objetivo de expandir la producción de soja y ganadería que principalmente se exportan a China y Europa. Estamos ante una grave crisis climática y de biodiversidad, por lo que no podemos perder ni una hectárea más”, plantearon desde Greenpeace.