El cambio de autoridades en una de las facultades de la Unne obligaría nuevos nombramientos en el Gabinete de Valdés. Los trascendidos dan por sentado que Gabriel Romero apostaría al Decanato de Artes y Diseño, lo que lo obligaría a dejar un cargo que lo supo instalar como uno de los funcionarios con mayor recorrido en lo que es el Gobierno provincial radical. Por el momento, no hubo confirmación oficial, aunque en la vecina orilla chaqueña, donde se encuentra la sede universitaria, los rumores cobran fuerza de que el 15 de mayo será ungido.
Gabriel Romero, presidente del Instituto de Cultura de Corrientes, se perfilaría como el nuevo decano de la Facultad de Artes, Diseño y Ciencias de la Cultura (Fadycc) de la Universidad Nacional del Nordeste (Unne), lo que implicaría para el Ejecutivo provincial generar cambios en el Gabinete dentro de un área que supo sumar laureles a la gestión, gracias al chamamé, a los carnavales, entre otras cuestiones.
Las versiones tomaron fuerza en las últimas horas, ya que el funcionario estaría decidido a ir como decano de la Facultad de Artes, para lo cual deberá dejar su cargo al frente del ente autárquico.
El arquitecto Romero está hace 13 años como timonel de un sector del Gobierno radical que supo instalar agenda regional y nacional a través de distintas iniciativas culturales.
Por estas semanas, se está ante la recta final del plazo para la elección de nuevas autoridades en la casa académica con sede en Resistencia, Chaco, y allí es que se presenta como el candidato con mayores posibilidades de reemplazar al titular actual de la Fadycc, Federico Veiravé.
Según se supo de fuentes allegadas, el nombramiento de Romero será público el próximo 15 de mayo, luego de que el Consejo Académico, que este jueves inicia la elección de sus consejeros miembros, representantes de los claustros no docentes, auxiliares, adjuntos y titulares para completar su nómina, comunique su decisión.
¿Y EL REEMPLAZO?
El panorama abre una interrogante sobre los derivados de la salida de Romero, que conllevaría nombramientos y reestructuraciones que deberá hacer Gustavo Valdés en el área cultural.
Con una trayectoria destacada en el ámbito y una profunda experiencia en la gestión institucional, Romero se presenta como un perfil idóneo para liderar la Facultad de Artes, y su eventual designación como decano supone un cambio significativo en la dinámica política del área de la región.
Desde espacios de gestión vinculados al Instituto de Cultura, señalaron a EL LIBERTADOR que un eventual nombramiento del Máster en Historia del Arte y la Arquitectura por la Universidad Politécnica de Cataluña, políticamente supondría una movida estratégica para Corrientes para fortalecer su presencia en una estructura nacional, dados los desafíos logísticos y administrativos que enfrentan las casas académicas al igual que las gestiones provinciales.
Cabe remarcar que Romero, además de presidir el Instituto y ejercer la docencia en la Facultad de Artes de Unne, es Académico Delegado Academia Nacional de Bellas Artes, vocal de la Comisión Nacional de Monumentos y Académico Titular de la Academia de Arquitectura y Urbanismo, tres de las más prestigiosas entidades abocadas a la protección, preservación y promoción del acervo artístico y patrimonial que atesora el país.
Transición con continuidad
Desde el Gabinete provincial, indicaron a EL LIBERTADOR que un eventual reemplazo de Romero requeriría un proceso cuidadoso de selección y designación de nuevas autoridades que garanticen la continuidad de las políticas culturales que Corrientes proyecta hacia adentro y hacia afuera de su propia jurisdicción.
La salida del actual Presidente del Instituto -indicaron- no generaría un vacío de liderazgo, dado que la gestión es seguida especialmente de cerca por el Gobernador, quien, según reconocieron, ya habría sido informado de la apertura de esta nueva etapa institucional por el propio funcionario.
De acuerdo a los últimos trascendidos, la venidera gestión cultural deberá enfrentar el desafío de mantener y fortalecer las iniciativas en un contexto de cambio y reorganización institucional, con nuevos espacios en pleno desarrollo y gran amplitud territorial, lo que ubicaría entre sus mejores candidatos al arquitecto Francisco Benítez, actualmente en el ejercicio de la dirección artística del Teatro Oficial Juan de Vera.