Buques de guerra y cazas chinos rodearon Taiwán este viernes 24, en el segundo día de maniobras militares que según Pekín buscan probar su capacidad para «tomar el poder» en esta isla de gobierno autónomo.
El ejército chino inició el jueves dos días de ejercicios militares alrededor de Taiwán, que el lunes celebró la investidura como presidente de Lai Ching-te, considerado por Pekín un «peligroso separatista».
Barcos y aviones del Ejército Popular de Liberación rodearon esta isla reivindicada por Pekín en lo que un portavoz diplomático chino describió como una «seria advertencia» a los «independentistas», que acabarán «ensangrentados».
El dispositivo forma parte de una campaña de escalada de la presión militar de China sobre esta isla de régimen democrático, con incursiones casi cotidianas de barcos y aviones en su entorno y varios ejercicios a gran escala desde 2022.
El portavoz militar chino Li Xi afirmó este viernes que las maniobras ponen a prueba «la capacidad conjunta para tomar el poder, atacar conjuntamente y controlar territorios clave».
La Guardia Costera de Taiwán denunció este viernes que cuatro buques guardacostas chinos habían accedido a «aguas restringidas» en su territorio, acompañados por otras dos embarcaciones de apoyo en las proximidades.
China y Taiwán se gobiernan separadamente desde el fin de la guerra civil en 1949, pero Pekín reivindica su soberanía sobre la isla y no descarta el uso de la fuerza para tomar su control.
El territorio apenas cuenta con relaciones diplomáticas oficiales con 12 países del mundo, pero dispone de gobierno, ejército y moneda propia y desempeña un papel crucial en la economía mundial como principal productor de semiconductores.
Fuentes: DW, Rr, Afp y Reuters.