Sólo un par de jugadores de renombre, se salvaron de la escoba que agarró el técnico, Raúl «Pipa» Estevez en Boca Unidos.
Antonio Medina, el último ídolo «aurirrojo» que queda en actividad, y Gabriel Morales son los futbolistas que comenzaron con los trabajos de puesta a punto en el inicio del ciclo como entrenador del «Pipa» Estevez en el transcurso de la semana que finaliza.
Está claro que las malas campañas realizadas en las tres últimas temporadas en el Federal A, donde solo se consiguió mantener la plaza en la categoría, fue un detonante para dar de baja a todos los futbolistas que llegaron para la conformación del plantel a comienzos del año anterior y aquellos que habían acordado su continuidad en su momento.
De los que finalizaron la temporada 2022 vistiendo los colores del elenco «rutero» se alejaron de la institución los siguientes futbolistas: Christian Martínez (actualmente en Vélez Sarsfield de San Ramón-Santiago del Estero) tomó la decisión de alejarse y buscar nuevos horizontes.
Sebastián Luna, al ex San Lorenzo de Almagro y Belgrano de Córdoba no le renovaron contrato. Nahuel Franco retornó a Rosario Central, el marcador de punta Federico López tampoco logró el aval para continuar, igual los casos de Leonel Ceresole, Cristian Maidana, Juan Rivas, Gabriel Cañete que por rendimientos no terminaron de convencer.
El delantero Carlos Salom se fue a jugar al ascenso italiano en el club Pescara. En tanto que los futbolistas del club, Leonel Niz y Lautaro Larrasabal serían cedidos a otros clubes.
A su vez el marcador central Matías Espíndola, aceptaría una oferta que le hicieron de un equipo de una categoría superior. Lo mismo sucedió con Ariel Morales, dejó Guaraní Antonio Franco y se sumó a Defensores Unidos de Zárate que jugará en la Primera Nacional.
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