El anillo de fuego es el mayor evento astronómico que sucederá en la Argentina en lo que queda de la década. El próximo 2 de octubre por la tarde se dará el suceso en que el Sol, la Luna y la Tierra, serán alineados a la perfección, en ese orden y en una recta de 150 millones de kilómetros. Formarán un fenómeno que se conoce como eclipse anular, o en su denominación más espectacular, anillo de fuego.
Si bien toda la Argentina podrá verlo de forma parcial, la platea preferencial estará en la provincia de Santa Cruz, donde la alineación será perfecta y el fenómeno se mostrará en toda su plenitud.
De acuerdo con lo que publicó un diario porteño, unas 175.000 personas viven en las diferentes localidades donde el eclipse se verá en su totalidad. Desde Isla de Pascua, en pleno Océano Pacífico, hasta las Islas Malvinas, el cono de sombra que proyectará la Luna atravesará el sur de Chile y la Argentina. Esta zona se conoce como franja de anularidad, donde la Luna queda en el centro del Sol. “Pero aún ahí, el cielo no se oscurece como en un eclipse total, ni se ven las estrellas o los planetas en el firmamento, ya que la Luna no llega a tapar por completo al Sol”, aclara Eduardo Fernández Lajus, doctor en astronomía especializado en sistemas binarios eclipsantes.
“En este eclipse en particular, la luna estará muy cerca de su apogeo”, explica Eduardo. “Es decir que se ubicará lo más lejos de la Tierra que permite su órbita y, por ende, se verá lo más pequeña posible. Sin el suficiente tamaño aparente para cubrir toda la superficie del Sol. Por eso será un eclipse anular y no uno total”. El también investigador del Conicet agrega, para mayor exactitud, que nuestro satélite ocultará el 96% del astro rey y el sobrante se verá bordeando a la Luna, formando el espectacular anillo de fuego.