Nelsón Gregorat e Inés Dalio hicieron casi mil kilómetros desde Córdoba a Corrientes para asistir, por primera vez, a la Fiesta Nacional del Chamamé que celebra su 32° edición nacional, 18° Fiesta del Chamamé del Mercosur, y 2° Celebración Mundial.
En su ingreso al anfiteatro Mario del Tránsito Cocomarola en la noche de apertura, hablaron con EL LIBERTADOR sobre esta travesía que emprendieron juntos, en automóvil, a una edad que no quisieron revelar. Pero sí compartieron cuántos años llevan como compañeros de ruta y de la vida: 50 años.
«Estamos festejando nuestros 50 años de casados», reveló Nelsón. El 11 de enero de 1.973 dieron el sí de por vida, y lo reafirmaron, bajo la luna chamamecera, con el mismo sentimiento que se grita un sapucay. Ella nació en Sampacho, él en Suco de Oro. ¿Y cómo se conocieron? «Bailando», contestó Inés. «No un chamamé, sino un bolero», recordó Nelsón.
Sobre la decisión de viajar por primera vez a Corrientes, en sus días de celebración de su Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, Nelsón comentó que tenía «una deuda pendiente». «Trabajé en el sur, estuve en el Norte, me faltaba el Litoral», contó.
«¡Y soy fanático del chamamé!», exclamó, para luego explicar que al escucharlo lo siente en el corazón.
Así como Inés y Nelsón, turistas de otras localidades y provincias hicieron kilómetros para unirse a los festejos de la Nación Chamamecera en la primera de sus diez noches, con un escenario de artistas regionales, nacionales y de países cercanos, en una gran enchamigada mundial.