Esta familia futbolera, de provincia de Buenos Aires, está cumpliendo su sueño. Emprendieron un viaje para llegar a Nápoles, Italia. A bordo de un colectivo Mercedes Benz L 312. Y en dos semanas lograron recorrer varias ciudades. Desde el viernes se encuentran en Corrientes, donde pasaron la Navidad.
Estefanía, junto a su esposo Lucas Artini, y sus tres hijos, estaban asentados en la ciudad bonaerense de Mercedes. En donde tenían su casa y un local de venta de indumentaria deportiva. Pero decidieron dejar esa vida y perseguir su principal objetivo: ir hasta la ciudad que adoptó a Diego Armando Maradona, y en la que vivió sus mejores años.
FANATISMO
Para hacerlo realidad, tuvieron que alquilar su casa, vendieron su negocio, y cambiaron su vehículo por un colectivo modelo 61. Que se encargaron de remodelar para que se convirtiera en su hogar donde el viaje, al que llamaron «Pelusa por el mundo», es en homenaje al astro.
El lunes 12 dejaron su vida en la ciudad, y ya visitaron Rosario, Santa Fe; Victoria; Paraná; Villaguay; Federación, Entre Ríos. Sobre su llegada a Corrientes, Estefanía le dijo a EL LIBERTADOR que la Capital correntina les pareció muy linda, pero sin duda se enamoraron de las ciudades del Interior. Ya que estuvieron en Mocoretá; Curuzú Cuatiá y Paso de la Patria, en donde pasaron la Nochebuena junto a otra familia que también viajaba en un motorhome.
Con respecto a sus planes, Zárate comentó: «Tenemos puntos fijos donde queremos ir llegando. Como en este momento Paraguay, después Brasil hasta el Norte». En donde planean «cruzar el Canal de Panamá, llegar hasta México y de ahí cruzar al viejo continente». También mencionó que no hay una ruta establecida. «Sólo nos dejamos llevar por lo que nos cuentan las personas y todo depende de los kilómetros que podamos hacer por día y las temperaturas que hagan», agregó.
Al ser consultada sobre si visitaron Esquina -la tierra natal de los padres de Diego- Estefanía mencionó que no pudieron ir. «Porque teníamos en nuestros planes cumplir la promesa de llevar a «pelusa» (motorhome) al Gauchito Gil en Mercedes. Y como veníamos de Curuzú Cuatiá se nos desviaba mucho», concluyó.
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