La National Oceanic and Atmospheric Administration (Noaa) anunció oficialmente el fin del fenómeno de La Niña, el problema es que el mismo pronóstico muestra que podría volver a estar presente en Argentina y Brasil sobre finales del 2021 e inicios del 2022, informó Momarandu.
El agroclimatólogo de la Universidad de Talca, Patricio González explicó que «el fenómeno implica un bloqueo de precipitaciones en diversas regiones como en parte de Argentina, Paraguay y el sur del Brasil donde yace uno de los principales polos de producción agropecuaria del mundo».
El regreso de La Niña afectaría a las producciones y también generaría la continuidad de los bajos niveles del río Paraná, la más importante de los últimos 50 años. Esto genera complicaciones en la navegación de los buques, y, por lo tanto, pérdidas en su capacidad de carga. Según estimaciones oficiales, durante mayo los barcos deberían cargar un mínimo de 7,2 millones de toneladas de trigo, maíz y harina de soja, pero como consecuencia de la bajante se redujeron en casi 730 mil toneladas.
Según los cálculos de la Bolsa de Comercio de Rosario, el bajo nivel del río representó en 2020 una pérdida de u$s 244 millones para las exportaciones de granos por no poder cargar los buques en los niveles habituales.