En enero, las ventas minoristas de las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes) experimentaron una caída del 28,5 por ciento en comparación con el mismo período del año anterior, según la medición a precios constantes del Índice de Ventas Minoristas Pymes que elabora la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came). Respecto a diciembre, se registró un descenso del 6,4 por ciento.
Desde la Came indicaron que este inicio de año se caracterizó por un mal desempeño en el sector comercial, marcado por escasas transacciones y una baja afluencia de público en los locales.
Los comercios consultados por la Came coinciden en que enero fue un mes perdido, principalmente debido a la incertidumbre económica y al pronunciado aumento de los precios, que no fue acompañado por un ajuste en los salarios. Sin embargo, los comercios consideran que queda una considerable demanda postergada y se espera que parte de ella pueda recuperarse durante febrero.
SECTORES
En el rubro Alimentos y bebidas las ventas tuvieron un derrumbe del 37,1 por ciento en enero respecto al mismo mes del año anterior a precios constantes y registraron un retroceso del 13,2 en la comparación con diciembre.
Fue un mes de muy poca venta, donde incluso los sectores de mayores ingresos se volcaron a productos de segundas y terceras marcas. Desde los comercios comentaron que recibieron aumentos semanales de entre 5 y 10 por ciento que, al trasladarlo al consumidor directamente, frenaban la venta.
En Bazar, decoración, textiles para el hogar y muebles, las ventas descendieron 20,5 por ciento anual y 5,4 en el contraste mensual.
Las tiendas del rubro sintieron la pérdida de ingresos familiares, a pesar de que se intentó no trasladar a los importes todo el aumento mayorista. La gente compró cosas de bajísimo valor y en los centros de veraneo, la demanda fue muy baja y es donde más se pudo observar el malestar empresario en la encuesta.
En Calzado y marroquinería hubo una baja del 20,8 anual y del 7,1 contra diciembre, pese a que los comercios pusieron todo lo posible en liquidación, pero el cliente no se dejó tentar.
Se vendió calzado de muy bajo precio, principalmente para la playa y algo de calzado semi formal clásico. Las zapatillas deportivas, por sus altos valores, fueron las más postergadas del mes.
En el rubro Farmacia, las ventas se desplomaron 45,8 por ciento anual en enero y 7,9 en comparación con diciembre.
Fue un pésimo mes para las farmacias, que se quedaron con un caudal de stock importante frente a la drástica caída del expendio. Algunos empresarios consultados señalaron que las cifras de enero parecen las de un mes donde nadie se enfermó.
Los comercios que venden productos de Perfumería tuvieron una caída en las ventas del 32,6 por ciento anual en enero y del 7,8, en el balance intermensual.
Desde las perfumerías encuestadas apuntaron que muy poca gente entró a los negocios este mes, ni siquiera a consultar.
En Ferretería, materiales eléctricos y materiales de la construcción, las ventas se hundieron 31,3 por ciento anual y 7,3 a nivel intermensual.
Fue uno de los ramos más golpeados, que recibió además el impacto por el abrupto freno de la obra pública y en la construcción privada.
Finalmente, en Textil e indumentaria las ventas subieron 0,9 por ciento anual en enero, a precios constantes, aunque cayeron 2,8 mensual.
Fue el único rubro en alza, lo cual sorprendió por el contexto general, debido a que mucha gente había postergado compras para enero, esperando las liquidaciones y eso contribuyó a que el mes no sea tan malo como en otros sectores.
.