El presidente de la Sociedad Rural de Corrientes, Francisco Velar destacó la necesidad de establecer parámetros que prioricen la distribución de vacunas en la región mesopotámica debido a su proximidad con los focos del vector detectados en el extranjero y la presencia de casos locales.
La encefalomielitis equina ha resurgido recientemente en el ganado ecuestre, tras varios años de ausencia y la interrupción de la campaña de vacunación. En 2016, el Senasa decidió que la vacunación ya no era obligatoria, a diferencia de lo que sucede en Brasil y Paraguay, donde el medicamento veterinario sigue siendo obligatorio.
Francisco Velar subrayó, en declaraciones al programa radial Bichos de Campo, que esta disparidad con los países vecinos, señalando que en la provincia hay múltiples focos de la enfermedad equina y existe una creciente preocupación por su propagación en la población de caballos, ya que estos animales son ampliamente utilizados en el campo y el clima de la Mesopotamia propicia la difusión de la enfermedad.
En relación con esto, Velar comentó: «Quizás no sea necesario vacunar en todo el país; en las zonas templadas, puede que no sea tan esencial como en la Mesopotamia, donde es urgente aplicar la vacuna debido a la alta presencia de insectos, especialmente en verano. Por lo tanto, se prevé que la enfermedad se propague rápidamente, ya que no hay vacunas ni anticuerpos en los animales».
El dirigente expresó su esperanza de que, «en 10 o 15 días, tengamos alrededor de 300 mil dosis disponibles para su aplicación», provenientes tanto de la producción nacional de la empresa Tecnovax como de posibles importaciones, aunque esta última opción parece más complicada debido a los problemas cambiarios en la economía.
«Esta zoonosis se transmite de las aves migratorias a los mosquitos y, a su vez, de estos a los equinos y humanos. Dado que no estamos vacunando, enfrentamos dificultades para obtener la vacuna. En la provincia hay varios casos. Por eso, estamos coordinando con el Senasa para acelerar los procesos», sostuvo.