Un día después de la tormenta que ocasionó destrozos en la Capital, fuentes del Municipio comentaron a EL LIBERTADOR la situación en las inmediaciones a una torre de la Costanera cuya grúa fue derribada por los vientos. El hecho ocurrido el martes en la tarde causó pánico ya que la estructura metálica de importante tamaño quedó colgada a gran altura y había riesgos de que cayera al vacío provocando más daños en los alrededores.
«Se trabajó de inmediato y se tuvo que evacuar a los moradores de cuatro viviendas lindantes a la construcción de la torre. En total son catorce personas que fueron llevadas a un hotel y que permanecerán allí hasta que toda el área esté completamente asegurada. Es una obra privada y los gastos del alojamiento de las familias corren por parte de la firma a cargo», explicó el subsecretario de Gestión Integral de Riesgos y Catástrofes, José Pedro Ruíz.
De las casas que debieron ser evacuadas, el funcionario mencionó que dos se encontraban sobre General Paz y Costanera y las restantes, sobre Necochea y Costanera. Y en cuanto al alojamiento, dijo también que se trata de un reconocido hotel de lujo en que permanecerán hasta que sea seguro su regreso.
Del posible riesgo en la zona, Ruíz dijo que se trata de dos torres, la Norte y la Sur. «En la Sur no pasó nada grave y la obra puede continuar. La grúa se desplomó en la Norte y ahí el trabajo fue clausurado. De inmediato la empresa se hizo cargo y la zona ya está asegurada. La grúa no corre riesgo de caerse», detalló.
También dio a conocer que ayer hubo una reunión entre los responsables y que iban a decidir cómo continuar los trabajos una vez que se retire la estructura metálica. «De momento, todo el proceso lo sigue la Dirección de Obras Particulares», completó.
.