La Cámara de Apelaciones Civil, Comercial y Laboral de Goya intervino en un caso que involucra a una joven de 18 años con retraso madurativo que habría sido víctima de abuso sexual.
Tras el pedido de levantamiento de una medida cautelar dispuesta para un hombre acusado de abusar de la joven, los jueces rechazaron el pedido por haberse interpuesto fuera de plazo. Sin embargo, y de oficio, decidieron ampliar las medidas de protección para la víctima.
Los magistrados solicitaron que el Área de Psicología Forense del Poder Judicial (Goya) evalúe al hombre que solicitó el levantamiento de la restricción, a fin de conocer las actuales situaciones de riesgo relatadas.
Asimismo, instaron al Ministerio Público a que determine la capacidad de la joven para recibir el apoyo y contención que requiere por su historia de abuso psicológico y retraso madurativo. Solicitaron la determinación de su real filiación paterna, según los datos aportados por la madre.
Las medidas adoptadas por la Cámara de Apelaciones responden a un abordaje integral que contempla la perspectiva de género y la protección de la persona víctima de abuso sexual, conforme a la Ley de Protección Integral a las Mujeres N° 26.485.
Vulnerabilidad y violencia de género
El caso llegó a la Justicia tras detectarse que la joven, además de tener retraso madurativo, no cuenta con escolaridad y se encuentra en una situación de extrema vulnerabilidad.
Las actuaciones judiciales revelaron que la joven padecía asimetrías de poder respecto de su entorno, lo que la mantenía marginada, sin higiene y por momentos sin vivienda ni comida.
Los magistrados destacaron la importancia de actuar de oficio para proteger a la joven, quien desde niña ha padecido situaciones de abuso por parte de personas en las que confiaba, empezando por su madre (también con limitadas facultades cognitivas), su progenitor afín (presuntamente adicto al alcohol) y el hombre acusado de abusar de ella.