Se estima que llovieron más de 80 milímetros en muy poco tiempo lo que sumado a una mala ejecución de los arreglos en el colegio más conocido como La Regional provocaron que las instalaciones sufran una gran filtración de agua. Si bien las autoridades sostienen que el Gobierno ya está al tanto de lo que allí ocurre, las soluciones que les brindaron hasta el momento no fueron suficientes. Desde la institución educativa temen que los desperfectos se agraven durante el verano, lo que llevaría a complicar el buen desarrollo del ciclo lectivo 2024.
“Desde que empezó a llover más fuerte que está entrando agua. Están afectados tres sectores del colegio: el área del gabinete de físico-química, los baños y las galerías de arriba. Lo más grave es que desde Infraestructura del Gobierno vinieron, dieron vueltas y lo arreglaron recientemente. Pero no lo hacen bien, porque hoy nos encontramos afectados los más de 50 docentes que trabajamos en el lugar y los 1500 alumnos que asisten a nuestra institución», sostuvo la Rectora de la Escuela Normal José Manuel Astrada, Rosalía Cardozo.
Según detalló ya se vivió una situación similar el jueves pasado, donde ya debieron trasladar a sus alumnos a otros espacios para evitar exponerlos a riesgos mayores. Allí funcionan tres niveles: jardín, primaria y secundaria en ambos turnos, es por ello que expresó: “No podemos seguir así moviendo a los chicos de lugar en lugar. Nosotros mismos también buscamos trabajar con dignidad. Como personal docente que somos no vamos a tener vacaciones porque nos tendremos que ocupar de lo que está pasando acá, no queremos que sea un malestar constante. Estamos viendo como se descuida un monumento histórico, pese a todos los reclamos que venimos realizando. Nos escuchan, pero no resuelven lo que nos pasa”.
INSTALACIÓN EDILICIA EN CRISIS
“Nosotros no podemos llamar a nadie, porque no tenemos recursos. Tampoco podemos hacer que un docente o un albañil suba a arreglar esto porque es mucho el riesgo por la altura con la que cuenta nuestro edificio. Además, nos duele porque no podemos permitir que una estructura institucional que cuenta con 136 años se pierda de esta manera”, sostuvo con preocupación.
“Acá nos afectan tanto las temporadas de lluvias, como las de mucho calor porque saltan las llaves, las puertas se rompen. Es todo muy antiguo y no dejamos de sorprendernos por como el Gobierno inaugura escuelas nuevas, mientras que a las que existimos hace tantos años nos deja a la espera. Estamos evaluando convocar a ex alumnos para que nos ayuden a juntar donaciones y fondos para nosotros mismos hacernos cargo de los arreglos porque no podemos exponernos a que nos pase algo grave si seguimos así”, concluyó.