Se debe a una suba del Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y al Dióxido de Carbono anticipada en el decreto 107/24 publicado el 1 de febrero.
Con la nueva actualización que aplicará el Ejecutivo en los impuestos al combustible, el litro de nafta subiría un 4,4% promedio. Resta conocer de cuánto será el incremento que aplicarán las petroleras en los valores de venta en los surtidores.
Es por el cronograma que diseñó Energía a partir de la actualización del impuesto a los combustibles, que estaban congelados desde hace dos años.
De esta manera, el tercer mes del año comenzará con un nuevo incremento en el gravamen sobre los combustibles líquidos, que se trasladará a los surtidores de las estaciones de servicio de las distintas petroleras.
Además, a fines de abril y mayo se aplicará la cuarta y última actualización de los impuestos que habían sido postergados en reiteradas oportunidades desde julio de 2021 durante la gestión anterior.