Esta mañana se reanudó la sesión del Concejo Deliberante bajo una fuerte tensión institucional. A nueve días del fallo que determinó la suspensión del Intendente el status quo no se modificó. Hoy a partir de las 8 vuelve a sesionar el cuerpo en búsqueda de una salida institucional.
Anoche una multitud siguió desde la Plaza los acontecimientos con Tape Caram bien plantado pasando revista a la tropa, recibiendo las vivas de sus partidarios que apuestan a que este episodio sea el trampolín del sueño de llevar nuevamente un mercedeño a la gobernación aunque no está claro a través de qué vehículo electoral.
Con mucho para ganar, y quizás mas para perder, el jefe comunal parece decidido a redoblar la apuesta. Juega a su favor una oposición desarticulada, y sin coordinación a la que muchos la ven como funcional al oficialismo local, y hasta echan sombras sobre sus conductas políticas.
Sin solución a la vista la situación podría trasladarse a una solución que podría darse en cualquiera de los tres poderes del Estado. El Poder Legislativo, el Poder Ejecutivo o el Superior Tribunal. Paradójicamente la decisión será unipersonal, con la firma de una sola persona. En feria judicial el cuerpo decide con la sola firma de uno de los ministros. Curiosamente un mercedeño, Guillermo Semhan podría ser el llamado a decidir la suerte de su pueblo.
Con la Legislatura en receso el Poder Ejecutivo queda habilitado a disponer por decreto una eventual Intervención ad referéndum de ambas Cámaras que deberán contar con los 2/3 para ratificarla. La facultad de designar al funcionario que de confirmarse la medida deberá llamar a elecciones corresponde a Gustavo Valdés.
La suspensión del Intendente es, de todas formas, provisoria hasta que el Tribunal Oral dicte el veredicto por la absolución o condena, y mientras esta claro que rige el principio de inocencia. Desde la Fiscalía podrían pedir el cese de la eximición de prisión aunque la decisión queda en manos de la jueza de Instrucción.