Con el Miércoles de Ceniza comienza mañana el tiempo de Cuaresma, cinco semanas que tienen como finalidad preparar a los fieles para la Pascua.
El arzobispo de Corrientes, José Adolfo Larragain presidirá la misa central a las 20 en la Iglesia Catedral.
En la misa, después del Evangelio y la homilía, se bendice y se imponen las cenizas de los ramos de olivo y otros árboles, bendecidos el año anterior al comienzo de la Semana Santa. Al imponer la ceniza en la frente de los fieles, el celebrante dice: «Conviértete y cree en el Evangelio», o bien «Recuerda que eres polvo y en polvo te convertirás».
De acuerdo a la costumbre, el Miércoles de Ceniza, junto con el Viernes Santo (que este año es el 18 de abril), es uno de los dos únicos días del año en que los cristianos practican el ayuno y la abstinencia.
Con el Miércoles de Ceniza, comienza el llamado tiempo de Cuaresma, que se extiende desde ese día hasta el Jueves Santo, excluyendo la Misa de la Cena del Señor.