Según la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados, en febrero se presentó el nivel más bajo de consumo de carne de vaca en los últimos 28 años. Cayó 5,4 por ciento respecto al año anterior.
Según las estadísticas de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (Ciccra) de acuerdo al promedio del último año, el consumo por habitante fue de 48,8 kilos anuales, lo que refleja 2,8 kilos menos que en el mismo período del año anterior. Si se lo compara con el consumo promedio del país entre 1950 y 1980 el mismo alcanzaba los 84 kilos por persona.
Entre enero y febrero, el precio de la nalga volvió a ser el que más aumentó: 13,6 por ciento. Detrás se ubicaron el cuadril 13,1 por ciento, la paleta 12,6 por ciento, la carne picada común 11,3 por ciento y el asado 9,9 por ciento.
Aún así, y si se suman las tres principales categorías de carnes (bovina, aviar y porcina), la Argentina es el segundo país con mayor consumo a nivel global, con 115 kilogramos per cápita, continuando con una tradición histórica de la nación. Sólo es superado por los Estados Unidos, cuyo promedio es de 120 kilogramos. El podio lo cierra Australia, con 105 kilogramos en el 2024.