El Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF) del Ministerio de Ambiente nacional, que conduce Juan Cabandié, suma dos aviones hidrantes al despliegue de recursos destinados al combate de los distintos focos de incendios que afectan a Corrientes. En el marco de esta emergencia ígnea que se registra en la Mesopotamia, Nación continúa asistiendo con el envío de equipamiento para esta provincia del litoral, gracias a la creación del comando unificado entre los gobiernos nacional y provincial.
Además de las nuevas aeronaves se suman a las tareas de combate otros 45 brigadistas convocados por el SNMF. El refuerzo de recursos se incorpora al despliegue actual que consta de 4 aviones hidrantes y 1 helicóptero pertenecientes al SNMF, junto a 93 brigadistas y personal de apoyo convocados por el SNMF y Parques Nacionales. También hay 2 autobombas, equipamiento y móviles de apoyo.
El secretario de Control y Monitoreo Ambiental, Sergio Federovisky, quien estuvo recientemente en Corrientes y puso en marcha al comando unificado entre Nación y la provincia, consideró respecto a la emergencia ígnea que se trata de un escenario “delicado”, “estamos ante una sequía colosal que lleva más de dos años”.
“Lamentablemente, en muchas provincias se sigue utilizando el fuego como instrumento, que en la mayoría de los casos son los inicios de los incendios masivos, gente que prende fuego sus campos, por ejemplo, lo que debería estar absolutamente prohibido”, consideró el funcionario nacional respecto a la práctica de quemas intencionales para desmalezar campos.
“La temporada seca en el centro del país, que normalmente es en invierno, no solo ocurre ahí. En Córdoba estuvo seis meses sin llover, en Corrientes la cantidad de agua caída en el último año representa menos del 30 % de los últimos años”, dijo Federovisky, al tiempo que agregó: “Tenemos que trabajar para que haya menos combustible en el suelo, tener las plantaciones forestales lejos del fuego y trabajar en alerta temprana”.