Este año que está iniciando se anunciaron que habrá dos eclipses totales, bañando la Luna en tonos rojizos.
De acuerdo con lo que anticiparon los expertos, ambos serán visibles en diversos continentes en marzo y septiembre.
Entre los fenómenos más esperados destacan dos eclipses lunares totales que teñirán la Luna de un profundo tono rojizo, además de la primera gran lluvia de meteoros del año, las Quadrántidas, que iluminarán los cielos con hasta 120 destellos por hora. Estos eventos, junto con varias superlunas y conjunciones planetarias, configuran un calendario astronómico lleno de maravillas.
Cuándo y dónde
Este año, la Luna se teñirá de rojo en dos ocasiones gracias a los eclipses lunares totales. El primero ocurrirá entre el 13 y 14 de marzo y será visible principalmente desde América del Norte, con una duración de totalidad de 65 minutos. El segundo tendrá lugar entre el 7 y 8 de septiembre y podrá observarse desde Europa, Asia, Australia y partes de África y América del Sur.
Durante un eclipse lunar total, la Tierra se interpone entre el Sol y la Luna, proyectando una sombra que cubre por completo al satélite. Los tonos rojizos se deben a que los rayos solares que atraviesan la atmósfera terrestre se refractan y proyectan este color sobre la superficie lunar. Según la NASA, este fenómeno es seguro para observar a simple vista, pero una buena cámara o telescopio pueden mejorar la experiencia.
Tal como lo describe un diario porteño, además de ser espectaculares, estos eventos suelen estar cargados de simbolismo y cultura, con comunidades de todo el mundo atribuyéndoles significados especiales. Así, las lunas de sangre se convierten no solo en un espectáculo visual, sino también en una conexión con antiguas tradiciones y mitologías.
Además de los eclipses lunares, 2025 también ofrecerá dos eclipses solares parciales. El primero será el 29 de marzo y será visible desde Europa, Asia, África y América. Durante este evento, que alcanzará su punto máximo alrededor de las 11:03 GMT, el Sol parecerá tener un “bocado” en su borde, un efecto que es posible observar con lentes solares especiales. El segundo ocurrirá el 21 de septiembre y será más apreciable desde el hemisferio sur, especialmente en Nueva Zelanda y partes de la Antártida.
Aunque no se trata de eclipses totales, estos eventos siguen siendo fascinantes y representan una oportunidad para aprender sobre la interacción entre la Tierra, la Luna y el Sol. Como siempre, se recomienda utilizar equipo adecuado para proteger los ojos al observar un eclipse solar.
Superlunas
Las superlunas volverán a captar la atención de los observadores del cielo en 2025. Este fenómeno ocurre cuando una luna llena coincide con el perigeo, el punto más cercano de la órbita lunar a la Tierra. La más grande y brillante del año se verá el 5 de noviembre, prometiendo ser la más impactante desde 2019.
“Las superlunas son una excelente oportunidad para observar nuestro satélite en su máxima expresión”, mencionó Darren Baskill, astrónomo de la Universidad de Sussex. Durante estos eventos, la Luna puede parecer hasta un 30% más brillante y un 14% más grande que en otras noches, especialmente al momento de su salida o puesta, cuando se encuentra cerca del horizonte.
Fuente: Infobae