Alguien vinculado a las actividades rurales, para quien es habitual moverse desde temprano, compartió con el Vicegobernador la cena que Gendarmería Nacional organizó días atrás y que se extendió hasta altas horas. La misma persona se encontró, horas después, a la salida de Corrientes, a las cinco de la mañana, con Pedro, quien comentó que iba para Monte Caseros. Allá cumplió una nutrida agenda, vinculada a los actos por el 195 aniversario de la localidad, a lo cual sumó, como es norma en sus salidas al Interior, la atención a la actividad partidaria que realiza en toda la Provincia en una tarea, muchas veces silenciosa, pero que apunta a calentar los motores y clavar un mojón del Partido Popular en cada localidad, con la mirada puesta en el 2025, donde -se espera- la elección más atípica desde el retorno de la democracia, con varios frentes en carrera.
Casi sobre la medianoche, y después de una jornada intensa, el Vicegobernador estuvo de vuelta en la Capital. De hecho, Braillard Poccard mostró estar en forma. Viene de participar de una competición, que convocó a 1.500 personas, en Itá Ibaté, y en la cual sorprendió al correr, mostrando que tiene resto para lo que será una carrera de resistencia. De ahí el mote que se ganó de: Pedro, «el incansable».
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