El vicegobernador de la Provincia, Pedro Braillard Poccard fue entrevistado en el programa La Otra Campana, que se emite simultáneamente por LT7 Radio Corrientes y LT25 Radio Guaraní, de Curuzú Cuatia.
En conversación con el periodista Gustavo Adolfo Ojeda, el presidente del Partido Popular se explayó sobre diferentes cuestiones que hacen a la realidad provincial y nacional.
A continuación el desarrollo de la conversación.
¿Como viene la agenda polìtica del Partido Popular?
Estuve dedicado todo el mes de enero y febrero a recorrer la provincia, reuniéndome con los distintos comités, tengo el propósito de, lamentablemente las inclemencias climáticas me obligaron a que muchas de esas visitas se circunscribieran al tema climático, de ayudar en las emergencias. En muchos casos estuve por disposición del Gobernador, presente en algunos lugares como en Paso Tala o en Bella Vista en su momento. Lo importante en ese aspecto fue que el mecanismo de emergencias funcionó muy bien. Y bueno, pero como le decía, estuve reunido y pienso seguir reuniéndome, quiero llegar antes de la mitad del año a tener reuniones con cada uno de los comités que tenemos organizados en la provincia, que es la inmensa mayoría de las comunidades. Porque nosotros hacemos una actividad muy intensa haya o no campaña, lo que va del año ya hicimos el verano popular, hicimos una serie de actividades y tenemos una agenda muy nutrida, y como yo les digo siempre, este es el año que hay que trabajar, porque entonces el año que viene, cuando viene el tema electoral, es natural que estemos en la calle, aunque estuvimos siempre.
Lo veía hace poco muy inmiscuido en un tema que cala hondo en el sentimiento nacional: la causa Malvinas. Usted fue funcionario en el Municipio capitalino durante la guerra ¿No? siendo Ricardo Leconte intendente capitalino.
Si, aunque lo increíble sucedió cuando Ricardo Leconte fue Gobernador y yo era subsecretario de gobierno. Nos tocó organizar el primer viaje de deudos de héroes de Malvinas a Malvinas. Lo que fue todo un tema porque todavía Argentina no había recompuesto las relaciones diplomáticas con Gran Bretaña, que después se acuerda que se recompusieron haciendo el famoso paraguas. Se recompusieron las relaciones diplomáticas y se hizo ese viaje. A mí me tocó, en alguna manera, organizarlo. Fue una cosa sumamente emotiva. Yo los acompañé al primer contingente de deudos hasta el aeropuerto y organizamos la primera oficina de Malvinas, que dependía del Ministerio del Gobierno y Justicia en esa época. Fue todo una bisagra. Ahí empieza toda una etapa. Después vino la condecoración que dio el Congreso de la Nación a todos los que participaron en el conflicto. Y después algunos beneficios que van a tener una sustancial mejora cuando empiezan las pensiones, tanto la pensión nacional como las pensiones provinciales. Ya eso en 2000, en tiempos posteriores. Y no solamente las pensiones, sino después lo que es política de Estado para el gobierno provincial, que son los centros de atención, los centros comunitarios de atención que son manejados por los propios ex combatientes, veteranos, que incluyen servicios de salud, pero básicamente acompañamientos. Hay que separar dos cosas, ¿No? Una es la motivación que existió en los que tomaron la decisión. Uno puede estar de acuerdo o no. Y esto es un tema que se va a debatir siempre. Pero lo que no se puede discutir es el mérito de los que fueron a ofrecer nada más y nada menos que su vida defendiendo la causa, defendiendo la bandera, defendiendo el honor de la Argentina.
Malvinas es todos los días y algo permanente, como usted bien lo dice, ¿No?
Sí, efectivamente. Por eso le digo, la decisión, los motivos que llevaron a la decisión de la recuperación es lo que se puede discutir, se puede polemizar y hay argumentos muy duros. Lo que no se puede discutir es el mérito y el heroísmo de quienes fueron.
Quiero recordar también y en cierta manera rendir un homenaje a un gran correntino que nos ha honrado en la representación senatorial, que fue Canciller de la República y que siempre también estuvo preocupado por el tema de interés nacional. Me refiero al Senador Nacional Juan Ramón Aguirre Lanari, Senador de la Nación, Canciller de la República, que trabajó mucho.
Al doctor Aguirre Lanari le tocó nada más y nada menos después de finalizada la guerra, y ya como Canciller, tener que ir ante la asamblea de Naciones Unidas y defender la posición argentina. Se logró que la Asamblea volviera a decirle a Gran Bretaña, que era la potencia triunfante:»tienen que dialogar sobre el tema Malvinas, tienen que negociar». Es decir, se reinstaló el tema, no es que se dijo esto está cerrado porque hubo una guerra que terminó y está cerrada la cuestión, no. Se reinstaló el tema, que tuvo un valor enorme, porque eso deja abierta la otra puerta, que es la lucha por la causa de Malvinas en los foros que tienen que ver con el con el derecho internacional.