Impedido de poder viajar a la «Capital de la Naranja» y queriendo cumplir con la segunda invitación que le realizaran en los últimos tiempos, el ex Diputado nacional accedió a una entrevista con el programa Punto de Vista, de Ñande Cable, de Bella Vista. Recibió a los periodistas en su oficina de la Capital de Corrientes. Ahondó sobre la actualidad partidaria, resaltando la decisión del juez Fresneda de «parar la pelota» y esperar la definición de la jueza Servini y de la Cámara Electoral Nacional ante planteos judiciales que están en condiciones de ser resueltos. Hizo hincapié en la suspensión de la proclamación de autoridades y candidatos, lo cual impide que invoquen la representación del partido. Instó a recuperar la gimnasia de los procesos electorales, pero en un marco de reglas claras que no se dio en las fallidas internas. No faltó un mensaje para Cristina Kirchner, titular del PJ Nacional.
02-POLITICA-2 03-POLITICA-9Lo sustancial del reportaje que hicieron Mauro Villar y Raúl Cuevas con el referente justicialista, Rodolfo Martínez Llano se dio de la siguiente manera.
Nos encontramos aquí, en la Capital correntina. Le agradecemos al doctor Martínez Llano que nos haya recibido.
-Buenas tardes a los telespectadores de Bella Vista y zona de influencia.
Recaemos en un tema de mucha actualidad, que es lo que ha dejado la interna del PJ. Se hizo un acto de proclamación de autoridades, pero conocíamos una información de que aparentemente queda en suspenso. ¿Es así?
-Efectivamente, en una decisión del juez Federal con competencia Electoral de Corrientes, Gustavo Fresneda. Dejó en claro que, hasta tanto la Cámara Nacional Electoral no se pronuncie respecto de la validez o no de la reforma de la carta orgánica, bajo la cual se desenvolvió el proceso electoral y la jueza, María Servini no se pronuncie respecto a la nulidad de la Intervención al partido, dejaba en suspenso, difería, postergaba la aprobación del escrutinio y la proclamación de candidatos. Es decir que hoy estamos en un «stand by», por el hecho de que el Juez, en su resolución deja en claro que no es momento, todavía, en que él pueda pronunciarse para no incurrir en contradicción. Señaló, con buen criterio, que antes deben expedirse, tanto la Jueza, como la Cámara Nacional Electoral. Esa es la situación actual. Hoy por hoy, no hay autoridades validadas por la elección interna, que nosotros veníamos cuestionando desde hace tiempo.
¿Esto es algo que ustedes ya lo marcaron?
-Claro. Este proceso electoral estaba viciado de origen. Dijimos que íbamos a participar, pero desde el momento en que se den reglas de juego claras. Nadie en su sano juicio va a una competencia de cualquier naturaleza sin saber esas reglas. Desde una carrera de caballos, a un partido de fútbol tenés que saber si son 11 jugadores, cuántas amonestaciones, los cambios que se pueden realizar, los minutos de duración de cada tiempo, la forma de definición si hay empate, los cambios que se pueden hacer, etcétera. Lo mismo vale para una partida de ajedrez, para el poder, el truco o unas cuadreras.
¿Esas garantías las dieron?
-No. Los interventores vinieron todo el tiempo escondiendo la leche. Jugando «al gallito ciego». No somos ingenuos. Consideramos que, después de 6 años, con interventores políticos, no podíamos ir a una elección con un nuevo interventor político que iba a hacer un esbirro del Instituto Patria. Ya tuvimos interventores que digitaron candidatos. Los resultados electorales todos fueron muy malos. Entonces, en estas elecciones pusimos los puntos sobre las íes. Rechazamos la modificación de la carta orgánica. Porque los interventores se extralimitaron. Es lo mismo que un Interventor Federal venga y para normalizar la Provincia antes de llamar a elecciones, modifique la Constitución. No puede hacerlo. Este cuestionamiento está para ser resuelto en la Cámara Electoral. Bajo esta carta orgánica se desarrolló el proceso, de manera de que, si la Cámara Electoral dice que estuvo mal reformada, como pensamos, cae todo como una fruta madura. Lo mismo con la Intervención, ¿por qué pedimos la nulidad de la Intervención? Porque la carta orgánica nacional del Partido Justicialista, en su artículo 21, dispone claramente que una intervención no puede durar más de un año. Esta intervención llevaba 6. Entonces, hubiera sido muy ingenuo de nuestra parte ir a una elección interna con referís bomberos. Es decir, interventores que en definitiva vinieron con la idea de consagrar una lista. Lo hicieron a sangre y fuego, quedaron muchos heridos. Ustedes saben en Bella Vista, el caso de la diputada nacional, Nancy Sand, la corrieron. También al diputado Romero. A mucha gente. De entrada, veíamos que eso iba a pasar, por eso no dudamos de entrada en no presentarnos. Pedimos que antes pusieran todas las cartas sobre la mesa para jugar.
Por eso planteaban, doctor, una instancia de una intervención judicial y no política.
-Claro. Queremos que la jueza María Servini, como la intervención es nula, designe un interventor judicial. Porque un interventor judicial brinda las garantías de que el proceso de la interna conduzca a la unidad mediante el voto. Estas internas, así como las que hicieron en el PJ Nacional, de consagrar una conducción a las apuradas, con los considerados leales a Cristina, no tienen la legitimidad como para conducir la diversidad que tiene el PJ Nacional. Quedó un sabor amargo de una interna que no fue. Celebro esta decisión del juez Fresneda. Es una decisión valiente. Lo dije muchas veces, a mí no me a complejiza el hecho de que digan que vamos a judicializar la elección interna. Lo asumimos absolutamente. La judicialización es la respuesta que da el derecho frente al abuso que por ahí cometen aquellos que creen que tienen el poder, o los resortes del poder interno, y que actúan como esos sindicatos, clubes de fútbol, es decir, esquemas cerrados que terminan manipulando y que hacen a la «desjerarquización» de la política como tal. Porque los partidos políticos dejan de ser el ámbito de participación de muchos jóvenes que quieren involucrarse, porque se encuentran con las vallas infranqueables de un sistema que viene cometiendo abusos. Frente a esos abusos, está la respuesta, de nuestra parte, en el campo del Derecho y la Justicia de lograr que un juez diga «no, primero lo primero». Si está planteada la nulidad de la intervención y la impugnación de la carta orgánica, veamos qué se resuelve. Y eso dispuso el juez Fresneda. Paró la pelota, y postergó la decisión en el recurso sobre la aprobación del escrutinio y la proclamación de candidatos. En una comunicación oficial posterior informó por oficio a la jueza Servini que la proclamación no estaba firme, habilitando a que la Jueza resuelva sobre la nulidad de la intervención.
¿Y qué tiempo llevaría resolver esta situación?
-Lo dijimos desde el principio también, cuando llamábamos a la reflexión. Incluso se hizo una audiencia en el Juzgado de María Servini, con la propia jueza, y dijimos que los tiempos de la Justicia no son los de la política. Nos preocupa. Cristina (Kirchner). Ella debió tomar en serio el tema Corrientes. Debió convocar al Consejo Nacional, para analizar y discutir. Puso al partido en el riesgo de que nos comamos los plazos, con el riesgo de que la lista 2 pueda no participar de este proceso electoral. ¿Qué debe pasar ahora? Para que se entienda; la jueza Servini debe resolver si es nula o no la intervención. Si resuelve que es nula, designará una intervención judicial. Si resuelve que no es nula, la parte perdidosa puede recurrir a la Cámara Nacional Electoral por el fallo de la doctora Servini. Por otra parte, la Cámara tiene, desde hace varios meses, la resolución respecto de la reforma de la carta orgánica. Por eso es que, lo que debe preocupar son los tiempos, que por ahí no se asocian a los de un cronograma electoral que se nos viene encima. Porque en Corrientes se va a votar en primera vuelta el 7 de septiembre y en segunda vuelta el 28 de septiembre. La elección nacional, el 26 de octubre. Desde ya, un aspecto que nos preocupa es que se dejó sin efecto las Primarias nacionales, eso significa que el justicialismo de Corrientes debe nominar, por un proceso interno, a los candidatos a diputados nacionales.
Otro cuestionamiento. De ir, por un lado, por los cargos electivos y, por otro, por los cargos partidarios.
-Lo que planteaba desde un principio era la necesidad de desdoblar la elección interna. Primero, que se vote en los 74 pueblos para que no se metan los dirigentes provinciales en las cuestiones locales. Cada pueblo es una realidad totalmente distinta. Y es malo cuando, con el ánimo de poder participar, los dirigentes provinciales se meten en las internas locales para hacer una línea provincial. Mi concepto es que lo de líneas es algo superado por los tiempos. Tenemos que pensar en listas y no en líneas, porque las líneas dividen. No podemos partir de la elección de un candidato a Gobernador o Presidente para abajo. Al contrario, el proceso debe ser inverso, debe fortalecerse de abajo hacia arriba. Es decir, los congresales, las autoridades locales y, después de que estén legitimados, uno sabe cómo debe construir el consenso. Es decir, quiénes son en la realidad los que mandan en Santa Lucía, Bella Vista, Goya, Esquina, en Pueblo Libertador. Porque a mí mismo me pasa que aun conociendo demasiado la geografía provincial al día de hoy, en cada lugar, no sabemos quiénes quedarán legitimados por el voto. Lamentablemente, el justicialismo hace más de dos décadas que no hace elecciones internas. Y es por eso que muchos no saben cómo son, hasta los abogados estos, algunos apoderados, están hablando pavadas respecto al fallo de Fresneda.
Hay una cuestión de que en el medio está la gente, el militante que no entiende qué pasó. Ustedes con este fallo, por ejemplo. También salió un comunicado por parte del PJ diciendo que no hay ninguna notificación que diga que queda en suspenso la proclamación de autoridades. El militante queda desorientado.
-Y eso no es bueno. Hay cierta mala fe de aquellos dirigentes que dicen eso, porque deben estar preparados para interpretar un fallo. El fallo en sí es muy claro, te leo dos párrafos: «Luce prematura la aprobación del escrutinio y la correspondiente proclamación de las candidaturas», esto lo dice el Juez, y después dice: «De acuerdo a lo expuesto, esta magistratura entiende que la homologación de la proclamación de listas debe diferirse hasta que obre debida constancia de que se han resuelto los planteos anteriores mencionados, dado que pueden existir conexidad con lo que se resuelva en esta instancia». En virtud de esto, resuelve remitir las actuaciones al Juzgado Criminal y Correccional Federal Nº 1 de María Servini para que ella resuelva primero. Entonces, deja las cosas en suspenso, no convalida. Es el Juez el que tiene que dar el certificado de que concluyó, porque sin el certificado no pueden ir al banco a habilitar la firma para disposición de fondos, no pueden hacer un trámite administrativo, no pueden hacer una presentación en el Juzgado Electoral provincial ni nacional. Están con las manos atadas. Sólo el Juez Federal es el que puede resolver que «está todo terminado». Eso no sólo no lo hizo, sino que además dejó en claro que la proclamación no está firme.
¿Esto, debilita más al PJ de cara a las elecciones 2025?
-Evidentemente debilita, porque esto se viene manejando mal. Al PJ creyeron que iban a tomarlo por asalto los bonaerenses. Vinieron de manera desordenada, con un personaje como Ottavis que es del Sur de la provincia, mandado por Cristina Kirchner como regente, queriendo imponer cosas. Lo que ha pasado es una lección, que desde Corrientes hemos dado. Yo mismo le dije a Cristina que es, no digo mi amiga, pero muy conocida, que se iba a «pelar la frente». Porque se iba a topar con el horcón del medio. Algo que ya le pasó a Carlos Menem, cuando quiso ponerlo a «Tato» de candidato del PJ. Por eso esta respuesta política y judicial que necesariamente debemos hacer para demostrarle a los bonaerenses, a los capitalinos y al país que no se hace lo que se quiere. Estábamos obligados a marcar la cancha y lo hemos hecho. Es una lectura que no deben olvidar puertas adentro.
¿Qué pasó con el dirigente de Corrientes que dejó que venga otro de Buenos Aires, con directivas de Cristina?
-Hace tiempo que esos dirigentes, que nunca participaron de elecciones internas, que no tienen la gimnasia, se acostumbraron al «dedo». Y algunos de los que se apartaron a lo último, se apartaron porque se dieron cuenta de que esta vez el dedo no iba para ellos. Nosotros fuimos previsores, antes de meternos en la competencia dijimos, primero, vamos a ver cómo son las cosas. Vamos a participar, pero no vamos a hacerlo de cualquier forma para convalidar un proceso que venía manipulado. Está claro que Cristina quería rapiñar una Diputación nacional en Corrientes, como vino rapiñando en las últimas elecciones y poner su gente. Y le decimos, es el pueblo peronista de Corrientes el que lo hace mediante el voto. Tenemos que hacernos respetar. Yo mismo, con 40 años de participación política, es una falta de respeto que quiera imponer en Yofre, Chavarría o en 9 de Julio candidatos, que al día de hoy no sé si tienen la vigencia que deben tener. Si hubiéramos hecho el Congreso, la elección desde abajo, entonces sabríamos con quién hay que consensuar. ¿Por qué no se pueden juntar 4 o 5 departamentos y acordar los candidatos, presidente del partido y demás?
¿Qué pasa si hay una resolución favorable y hay una convocatoria a internas? ¿Su sector participaría?
-Por supuesto. Pero para eso, tiene que darse un barajar y dar de nuevo. Para nosotros es demasiado fácil una elección interna porque desde hace 40 años estamos en esto. Es más, fui apoderado general de la fórmula Menem-Duhalde, y como tal participé de muchas reuniones en las cuales se acordaron con el sector de Cafiero las reglas de juego para esa elección, que fue de más de 2 millones y medio de afiliados. Hubo muchas discusiones, pero se acordó hasta el último punto y por eso no se llegó a la Justicia. Y esto es lo que no logramos con estos vándalos que vinieron comandados por un gordo facineroso, con el cuchillo bajo el poncho. Siempre digo: ellos podrán tener los resortes del poder interno, la Junta Electoral, el manejo de los padrones que determinó que haya miles de peronistas que no aparecieron, incluso algunos que se afiliaron en los últimos meses, pero nosotros no somos improvisados. Los esperamos a la vuelta de la esquina y de un solo golpe los mandamos a la lona. Fíjense, primero elevaron el número de la Junta a 11 miembros, como si fuera un equipo de fútbol. La Junta debe tener 3 o, a lo sumo, 5. Pusieron a 11 y, de ese número, pusieron a 7 bonaerenses que no eran ni afiliados en Corrientes, de modo de manejar completamente el tribunal interno. Es decir que todo estuvo hecho como para convalidar una lista. De esa forma no se logra la unidad que le dé potencia electoral a una respuesta que debe tener hacia el correntino el PJ. Lo mismo en el orden nacional. Tenemos que prepararnos para 2027 para ser una opción, para ganarle al Gobierno nacional, pero, para eso, tenemos que ordenar la casa.
Y ahora, ¿el peronismo no es una opción en Corrientes? Así como están dadas las cosas.
-La verdad, no puedo decir que sea. Viendo objetivamente las cosas, tengo que hacer una autocrítica, de lo que se ha hecho, de lo que falta hacer, la definición de un discurso que, de alguna forma, sea convocante, un marco de alianza que hay que hacer.
¿En lo personal, le gusta Ascua como candidato a Gobernador?
-Prefiero no opinar ni a favor, ni en contra, porque me parece que para eso están las elecciones internas. Son los afiliados los que deben calificar o descalificar. Más allá de eso y no teniendo ni una cuestión personal con nadie, creo que el candidato tiene que tener un poco más de envergadura, de presencia provincial. Tenés actualmente herramientas que son las que brinda la tecnología, es decir, encuestas que te marcan el nivel de conocimiento, de rechazo, la intención de votos. Son herramientas como para resolver políticamente qué conviene más.
¿Cuántos frentes ve para Corrientes?
-Creo puede haber 4 frentes de partida. Uno es el del Gobierno; otro es la otra parte del radicalismo en el que está el ex Gobernador; otro es La Libertad Avanza, que es el gran misterio. Y después el PJ, que hoy por hoy es todo un problema. La Libertad Avanza es una de las cartas que falta dar vuelta para ver quién es el candidato. La otra carta es la del Gobierno provincial. En eso también el PJ debió haber tenido la inteligencia como para demorar la decisión de la etapa final del candidato, porque el candidato es la frutilla del postre. Lo importante es darle fuerza a la propuesta electoral, a la dirigencia y, llegado el momento, se elige en un congreso partidario.
Antes ya mostraron las cartas.
-Sí. Aparte, si le ponés al candidato mayor a elegir hacia abajo, te divide todo.
Esta disociación que ha habido con la gente, el enojo con la política, ¿ha llevado a que hoy en día sea Milei el presidente?
-Claro. Milei es la consecuencia de eso. Y no sólo del justicialismo. Hoy tenemos fragmentado el radicalismo, el PRO, el PJ, la Coalición Cívica. Y se ha producido una involución. Y ahí es donde la Justicia debe marcar la cancha para que, en las décadas que vienen, no pase lo que está pasando estas dos últimas décadas, que los partidos políticos no funcionaron, no sólo el justicialismo. Los candidatos como se elegían, por unicato, por el tuit. En Corrientes siempre se elegía o Colombi o Valdés, y lo mismo en el PJ. Poco serio todo. Tenemos que volver a partidos que la gente sepa más o menos hacia dónde van a patear.
Milei con la política seduce a varios partidos de Corrientes. Lo escuché al presidente de Diputados, «Perucho» Cassani, diciendo que están haciendo bien las cosas. Los liberales que se acordaron de ser liberales y que también apuestan.
-Es que hay nuevos tiempos y el justicialismo debe comprender que hay muchas cosas que hay que hacer. Otras hay que mejorarlas, pero no podemos seguir pensando como hace 80 años. Porque la Argentina cambió, el mundo lo hizo. Desde la reforma laboral que es necesaria para que puedan incorporarse al mundo laboral millones de personas que están afuera, porque los que hoy lo están son privilegiados. Los sindicatos. No podemos quedarnos en el pasado. Tenemos que tener una visión superadora y saber que acá se habla mucho de derecha y de izquierda. Más que hablar de eso hay que tener racionalidad y matemática, porque la cuestión es que dos más dos son cuatro. No se puede gastar lo que no hay. La experiencia demuestra que, en estas últimas dos décadas, se ha perdido la cultura del esfuerzo, trabajo, mérito y eso no es bueno. Cambiaron las cosas. No tenemos la misma gente, con el pensamiento de varias décadas anteriores. La gente de ahora, hay muchos jóvenes que no ven a sus padres trabajar, entonces debemos entender que los tiempos de hoy son distintos.
¿Qué espera del justicialismo?
-Siempre tengo una actitud positiva y de esperanza, pero para eso hay que trabajar. Y el peronismo, como decía Eva Perón, es lucha. De lo que estoy muy satisfecho es de esto que se ha logrado, que fue frenar un proceso que no se desarrolló como Dios manda. Es un logro político, profesional, porque frente a las cosas que no estaban bien, no nos resignamos, no nos fuimos a nuestra casa. Sino que, sin enojarnos, porque «el que se enoja pierde», planteamos en el debido tiempo y forma, en las distintas instancias, las cuestiones que ahora se resuelven de esta manera. Creo que la política es diálogo, es no imponer, sino persuadir y convencer, escuchar mucho. El justicialismo debe ofrecer algo que nos permita recuperar el crédito de la gente. Acá lo que vale es el voto del común de la gente, los que suman y ahí la percepción que hay de que el voto es emocional. Eso se refleja fundamentalmente en la segunda vuelta electoral.
¿Usted ve esa expectativa?
-Me parece que no es fácil que gane en primera vuelta. El candidato o el frente que debería estar mejor es el del Gobierno, porque es el que maneja la caja y la estructura con un sistema electoral arcaico. Y si así fuera, en segunda vuelta estaría comprometido, porque el que sale segundo puede llevarse el pozo, los votos del que no quiere votar al Gobierno. Es una pena lo que ha hecho Cristina con el peronismo de Corrientes. Hasta que ella comenzó a operar era uno de los grandes favoritos para llegar a la final. Hay que tener presente que en la primera vuelta se elige a los dos finalistas, pero además se eligen intendentes y ahí tiene la importancia de en qué boletas van los intendentes. Porque si no van enganchados a una oferta electoral potente, por el efecto de la tracción de la boleta, los manda para arriba o para abajo. Por eso fue que con «Camau» en 2013 y 2017 salieron intendentes, mucha gente que no pensaba y después con Fabián Ríos se fueron abajo. Actualmente quedamos solamente con 6 intendentes, los cuales ya 2 medio que están del otro lado, que es el de Esquina y Mercedes.
¿Ricardo Colombi va a ser candidato a Gobernador para usted?
-Creo que va a ser, porque él es un hombre obcecado, caprichoso, perseverante. Lo tuvimos de socio. No lo queremos más porque es bastante difícil, pero reconocemos el mérito del trabajo y no descartamos que pueda hacer una buena elección. Él cree que puede ganar y no digo que por ahí no termine ganando, porque desde que vimos lo de Kirchner, que tenía un 6 por ciento y después terminó ganando, por las vueltas del sistema. Bueno, el que se juega, por ahí, gana.
Queremos agradecerle por el tiempo y la disposición de charlar.
-Gracias a ustedes y me comprometo en algún momento a visitarlos personalmente, sé lo que están haciendo y particularmente respeto al dueño de la empresa que yo sé lo difícil que es, pero por lo visto le pone mucha profesionalidad al trabajo. Muchas gracias por haberse molestado en venir hasta acá.