El mes pasado, se confirmó la aparición de casos de sarampión en la Argentina. La primera alerta epidemiológica fue emitida el 1 de febrero con una niña de seis años con residencia en Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba) y antecedente de viaje junto a su grupo familiar.
«Son seis casos confirmados de sarampión en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y dos de ellos relacionados a viajes, y los otros tienen que ver con la transmisión contacto con estas personas que han viajado», contó el reconocido infectólogo local, Fernando Achinelli en diálogo con EL LIBERTADOR.
A lo que agregó: «El Ministerio de Salud de la Nación, y de la Provincia, han transmitido una alerta para estar sensibilizados con los distintos centros de salud de cuando aparezcan síntomas de fiebre y exantema viral, de poder hacer las pruebas correspondientes, poder aislar a esos pacientes».
De esta manera, el profesional sostuvo que los hospitales y Caps se encuentran en alerta ante la posible aparición de síntomas. Por este motivo, recomendó a la población en completar el carnet de vacunación. Además de verificar el registro de al menos dos dosis de vacuna contra el sarampión.
TODAS
LAS EDADES
Achinelli, explicó que «es una enfermedad que desde el 2004 salió erradicado de las Américas, pero dado el descenso de las coberturas de las vacunas en general, en muchos países del mundo está re emergiendo esta enfermedad viral».
También, señaló que «en la Argentina, nosotros estamos libre de sarampión, y debemos continuar en esa lucha de que los padres vacunen a los niños al año de vida para protegerse de esta enfermedad, y es muy importante los viajeros que van a otras regiones del mundo, que antes de viajar actualicen su calendario de vacunas. Toda persona adulta debe tener al menos dos dosis de vacunas puestas».
Para concluir, el infectólogo instó a la población a actualizar los calendarios de vacunación, «recordar al año de vida y a los seis años, y las personas que no tienen deben hacerlo, consultar al sistema de salud y actualizar el calendario de vacuna», finalizó.
Cuáles son los síntomas y la importancia de la inoculación
El Ministerio de Salud de la Nación señaló que el sarampión «es una enfermedad viral, altamente contagiosa, que puede presentarse en todas las edades, siendo de mayor gravedad en niños menores de 5 años o desnutridos, en los cuales puede causar graves complicaciones respiratorias como neumonía y del sistema nervioso central como convulsiones, meningoencefalitis, ceguera, encefalomielitis postinfecciosa con retraso mental grave y trastornos degenerativos tardíos que no tienen tratamiento o incluso causar la muerte».
La vacunación es la única medida efectiva para prevenir el sarampión, paperas y rubéola. La misma, es obligatoria y gratuita en todos los vacunatorios y hospitales públicos. El Calendario Nacional de Vacunación incluye 2 dosis de Triple Viral a los 12 meses y a los 5 años de edad.
De 12 meses a 4 años inclusive deben acreditar una dosis de vacuna Triple Viral (sarampión-rubéola-paperas). Mayores de 5 años, adolescentes y personas adultas: deben acreditar al menos dos dosis de vacuna con componente contra el sarampión y la rubéola aplicada después del año de vida (Doble o Triple Viral) o contar con serología IgG positiva para ambos virus. Las personas nacidas antes de 1965 no necesitan vacunarse porque se consideran protegidas por haber estado en contacto con el virus.
Se recuerda que es una enfermedad vírica sumamente contagiosa. La misma también se propaga fácilmente cuando una persona infectada respira, tose o estornuda.
Antes de propagarse por todo el cuerpo, el virus infecta las vías respiratorias. Entre los síntomas se incluyen fiebre alta, tos, rinorrea y una erupción cutánea que se extiende por todo el cuerpo. Por la presencia de fiebre y erupción cutánea, se recomienda programar una consulta con profesionales de salud. Y no concurrir a lugares públicos hasta que lo autoricen.