Analistas políticos consultados antes del comienzo de las sesiones (previo a la convocatoria a extraordinarias) del nuevo cuerpo parlamentario nacional, aseguraron que la estrategia del bloque de La Libertad Avanza para tratar la Ley ómnibus que enviará el presidente Javier Milei al Congreso sigue siendo «un misterio».
A ello, agregaron que la incertidumbre en el radicalismo y con autoridades en oposición al nuevo Gobierno, suma complejidad al escenario político, con la añadidura de que la estrategia para ganar el respaldo público antes de buscar aprobaciones en el Congreso también será objeto de discusión.
Remarcan que las dificultades que enfrentará el nuevo Gobierno, especialmente en el Senado nacional, donde necesita mayoría, abren a los bloques oficialistas hacia un escenario de negociación comparable al equilibrio legislativo forjado por el gobierno de Carlos Menem en los 90, con minorías sólidas comunicadas por interbloques vinculados a liderazgos fuertes.
La falta de votos en el Senado nacional sigue siendo un misterio, remarcan, y en este contexto, será crucial observar cómo se desarrollarán los vínculos del Ejecutivo nacional hacia el Congreso, especialmente hasta marzo. De todas formas, el «triunfo» de Villarruel en esta semana marcó un camino que mostrará hasta dónde permitirá al oficialismo avanzar con el mega bloque «anti K» que permitió quedarse con los principales escaños del recinto.
SOBRE POSIBLE
ESTALLIDO
CAMBIARIO Y SOCIAL
Otras dos variables determinantes del nuevo escenario legislativo serán, según se señalan algunos expertos, la respuesta del mercado, aún con alto grado de incertidumbre económica y financiera, así como la capacidad que el Gobierno del nuevo Presidente tenga para enfrentar la oposición en las calles sin perder optimismo.
En este contexto, la inflación pronosticada y la falta de un plan de estabilización, aunque poco a poco los perfiles de todas las carteras del nuevo Gobierno comiencen a tomar forma sobre estos puntos con las nuevas medidas del Ministerio de Economía, se advierten como dos preocupaciones constantes que recaerán con peso sobre el apoyo público a las gestiones del primer mandatario.
Otro punto clave en la agenda presidencial, con impacto en las negociaciones legislativas será la relación que los gobernadores establecerán y cómo se manejarán los fondos que el ministro Luis Caputo dirigirá hacia los mandatarios, especialmente en relación con mantener o no los criterios trasladados por la gestión del ex ministro, Sergio Massa dentro del Presupuesto 2023, respecto a los fondos reflejados como aumento de partidas.
En ese sentido, destacan que la capacidad de Luis Caputo para negociar votos con los gobernadores, para obtener mayoría en el Senado nacional a través de las provincias, será «clave», al igual que la necesidad de hablar de dinero para obtener más apoyos en Diputados.
¿Gobernar con DNU?
Paralelamente, distintos analistas indican que, dadas las circunstancias legislativas, el Gobierno nacional podría recurrir a Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) hasta marzo, esperando que su estrategia legislativa sea aprobada por la totalidad de las bancadas de las cámaras parlamentarias.
Legisladores correntinos consultados por EL LIBERTADOR reconocen que la posibilidad del uso de DNU hasta marzo está cobrando fuerza, pero con limitaciones para ciertos cambios, especialmente aquellos que requerirán legislación primaria y legitimidad, como las reformas estructurales en materia impositiva. Aunque no descartan que esa sea la modalidad que adopte Milei para elevar las tarifas una vez que concluyan las sesiones del cuerpo parlamentario.
En este contexto, señalan que, en adelante, el papel de los operadores y colaboradores de los bloques e interbloques dentro del Congreso, así como el diálogo que mantendrán con quienes conocen su funcionamiento, será fundamental, especialmente ante la falta de experiencia de algunos libertarios en sitiales ejecutivos y legislativos, para evitar «la improvisación» en medidas relacionadas con el plan económico de transición, del cual aún no se estima cuál será su verdadero impacto.
Retrospectiva presupuestaria
En este contexto, el análisis retrospectivo del año 2023 y la anticipación de su ejecución plantean a los legisladores una doble agenda, en paralelo con la revisión de las leyes que demandará el Gobierno central y la implementación del Presupuesto 2024.
Destacan que, en esta perspectiva, la adaptación del radicalismo a la nueva corriente libertario-liberal y pro-mercado será determinante. Al mismo tiempo, la postura de Cristina Kirchner y el kirchnerismo frente al nuevo Gobierno sigue siendo «una incógnita». Esto se debe a la fragmentación del peronismo, con algunos de sus líderes incluso formando parte del Gabinete ejecutivo, lo que podría disminuir su influencia como «oposición férrea».
Otro aspecto incierto, señalan, sigue siendo la posición del Propuesta Republicana (PRO), con algunos de sus dirigentes respaldando plenamente las propuestas del presidente Javier Milei, mientras que otros se oponen abiertamente. Esta situación se vuelve más compleja al momento de tomar decisiones unificadas para determinar el rumbo de las políticas públicas desde la «mesa chica» de Juntos por el Cambio.
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