La incineración de casi 20 toneladas de droga incautadas por fuerzas nacionales en un aserradero de Colonia Libertad, debió suspenderse tras una primera quema de seis toneladas. Al parecer, un rotundo cambio en el sentido del viento, hizo que el humo no sólo se dirigiera hacia el interior de la comunidad, sino que en vez de elevarse, la densidad del mismo hizo que fuera hacia abajo, impactando en la población.
La Justicia Federal, que había habilitado la destrucción por incineración, debió hacer marcha atrás con la medida luego de que las autoridades municipales presentaran un recurso, informaron ayer fuentes oficiales.
El incinerador del aserradero tiene capacidad de destrucción de hasta seis toneladas diarias, por lo que el primer día alcanzaron esa cifra, y se tenía previsto que la medida sea agotada en por lo menos tres días consecutivos de incineración.
Pero ayer, antes de que las tareas vuelvan a reiniciarse, todo quedó suspendido y se ordenó el cese de la medida, así como el retiro del cargamento que no alcanzó a ser quemado. Se estima que habrá una reprogramación para la desnaturalización de la droga que se estaba destruyendo, ya sea en otra modalidad o bien en otro lugar.
Fuente: Power Noticias